El satélite 'Glory' cae en el océano Pacífico tras falla en el lanzamiento
El satélite de observación espacial Glory, lanzado el viernes desde California, no pudo desprenderse correctamente del cohete Taurus XL que lo propulsaba ni alcanzar la órbita. La fallida operación provocó que ambos aparatos cayeran en alguna parte del sur del océano Pacífico, informó la NASA.
El cohete de propulsión despegó con éxito a las 10:09 GMT de la Base Vandenberg de la Fuerza Aérea en California, pero seis minutos más tarde el director de lanzamiento, Omar Baez, indicó que había un problema en la operación.
Los primeros datos señalaban una falla en la separación del artefacto, valorado en 424 millones de dólares. El satélite debía separarse del proyectil propulsor 13 minutos después del lanzamiento para ubicarse en una órbita sincronizada con el Sol que le permitiera escanear la superficie de la Tierra.
La misión del artefacto Glory era proporcionar datos de alta precisión sobre las partículas atmosféricas conocidas como aerosoles y la radiación solarpronóstico de cambios en el clima de la Tierra.
El satélite debía incorporarse al programa A-Train, compuesto por varios sistemas de observación de la Tierra. El artefacto espacial, del tamaño de un refrigerador, estaba equipado con un instrumento capaz de medir las sutiles fluctuaciones de la energía emitida por el Sol .Los aerosoles y la energía solar afectan al balance energético del planeta
influyendo tanto la cantidad de energía que entra como la que sale de la atmósfera.La medición precisa de estos impactos permite anticipar los cambios en el clima de la Tierra y cómo pueden afectar la vida humana.
Los aerosoles son lo suficientemente pequeños como para flotar en la atmósfera de la Tierra y afectan las condiciones meteorológicas ya sea por la luz solar que absorben o porque la reflejan.
El objetivo de Glory era averiguar los efectos de estos aerosoles, por ejemplo, si podrían cambiar los patrones de la lluvia al introducirse en las nubes o si se acumularan en la atmósfera, y si estos efectos serían de larga duración.
Los efectos de algunos aerosoles se limitan a las partes del mundo que los generan. Por ejemplo, las ciudades en países en desarrollo a menudo producen la mayor parte del negro de humo, o el hollín, y es en esas áreas donde se ven los efectos de manera más clara, a veces, incluso, en forma de problemas de salud.
Sin embargo, otros aerosoles como el polvo del desierto del Sahara, llegan lo suficientemente alto en el aire como para ser transportados a través de los océanos. En el caso del Sahara, el polvo se ha visto en el Caribe.