Un sistema GPS es utilizado en Kenia para evitar la caza de leones
Los conservacionistas en Kenia reciben mensajes de texto de una fuente inesperada: leones que habitan la sabana.
No, los leones no se transformaron en adolescentes con pulgares hiperactivos, que envían mensajes de texto como: “Yummi, me acabo de comer una gacela LOL". Los animales llevan collares con un sistema GPS que envía mensajes automáticos a través de redes inalámbricas a los investigadores, quienes con la información recopilada los ubican en un mapa.
“Los collares con GPS cambiaron de manera fundamental la manera en la que se estudian a los leones, ya que podemos estudiar los movimientos del león con gran detalle en zonas en donde por lo general es imposible seguirlos”, dice en una publicación en la página web Living with Lions, uno de los grupos de conservación detrás del proyecto.
De acuerdo con el grupo, la población de leones en África en los últimos años se desplomó de más de 100,000 a cerca de 30,000. En parte porque los pastores Maasai locales , preocupados de que los leones cacen a su ganado, envenenan a los animales.
Durante años, los científicos rastrearon los movimientos de los leones y de otros animales salvajes con collares VHF que emiten señales de radio. Los datos ayudan a los investigadores a comprender mejor la estructura social, los índices de mortalidad, la ecología de la alimentación y otros comportamientos.
Pero ese método requiere que los trabajadores en el campo busquen las señales de radio del collar, y que después registren la ubicación del león en un GPS portátil, lo que lo hace un proceso complicado.
Los nuevos collares GPS calculan la ubicación exacta del león cada hora y envían un mensaje de texto a un servidor específico, que a su vez convierte (la información) en un correo electrónico. Posteriormente, los datos se agregan a un mapa satelital de código abierto en donde se muestran los movimientos de los leones, lo que le permite saber si los grandes felinos se encuentran demasiado cerca del ganado de los pastores.
La empresa estadounidense, Ground Lab y la alemana Vectronic Aerospace fabrican los collares. Aunque son costosos (más de 3,000 dólares por pieza en algunos casos y hasta el momento solo se le han puesto a 10 leones), el grupo Living with Lions espera recaudar fondos para comprar más.
Ground Lab ayudó a financiar el programa de rastreo de leones por medio de más de 10,000 dólares en donativos en Kickstarter , un sitio que le permite a los inversionistas y a los emprendedores buscar un financiamiento colectivo para sus proyectos.
Los collares no parecen muy cómodos, pero Living with Lions afirma que los amantes de los animales no tienen nada de que preocuparse.
“Los animales salvajes se acostumbran rápidamente a usar un collar de la misma forma en que lo hace un perro. En muchos casos, parece que apenas se dan cuenta de él incluso cuando se lo acaba de colocar, y en todos los casos se adaptan en unas cuantas horas”, afirma la página del grupo.