Microsoft enfrenta cargos por imponer su navegador Explorer en Europa
La Comisión Europea (CE) anunció este miércoles el envío de un pliego de cargos a Microsoft en el que la acusa de incumplir su compromiso de garantizar a sus clientes la posibilidad de elegir un navegador de internet distinto a su Explorer.
El Ejecutivo comunitario consideró que la compañía no lanzó una ventana que ofreciera la posibilidad de elegir navegador en su versión Service Pack 1 del sistema operativo Windows, comercializada desde febrero de 2011, a pesar de que se había comprometido a ello, señaló en un comunicado.
"Una vez que las compañías han aceptado los compromisos, deben hacer lo que se han comprometido a hacer o atenerse a las consecuencias", afirmó el vicepresidente de la CE y titular de Competencia, Joaquín Almunia, en una conferencia de prensa para explicar la decisión.
Almunia dejó claro que el envío del pliego de cargos "no prejuzga el resultado final de la investigación" que lleva a cabo la Comisión, que de demostrar las faltas de Microsoft podría derivar en una multa millonaria.
En los cargos, la CE destaca que de febrero de 2011 a julio de 2012 "millones de usuarios de Windows" pudieron no tener acceso a la pantalla de selección, un fallo que la propia compañía ha reconocido, apunta la Comisión.
En diciembre de 2009, el Ejecutivo comunitario había hecho legalmente vinculante una serie de compromisos propuestos por Microsoft para poner fin a los problemas de competencia que suponía la venta del Internet Explorer junto a su sistema operativo Windows, que domina el mercado de las computadoras personales.
En concreto, Microsoft se comprometió, durante un periodo de cinco años (hasta 2014), a poner a disposición de sus clientes en Europa una pantalla a través de la cual pudieran elegir el navegador que quisieran instalar para acceder a internet.
Esa posibilidad de elección empezó a aplicarse en marzo de 2012 para todos los usuarios europeos de Windows con Internet Explorer como su navegador por defecto.
El pasado 16 de julio, la CE decidió abrir una investigación formal a Microsoft para determinar si la empresa había incumplido alguno de sus compromisos.
El pliego de objeciones enviado este miércoles es un paso formal en la investigación de la Comisión y en él informa por escrito a las partes involucradas sobre las acusaciones.
Ahora Microsoft puede responder por escrito en un plazo de cuatro semanas a la Comisión, e incluso solicitar una audiencia oral para presentar sus comentarios, precisó Almunia. La CE tomará una decisión final una vez que la empresa haya respondido.
En el caso de que se demuestre finalmente que una compañía ha incumplido, la Comisión podría imponerle una multa de hasta el 10% de su facturación total anual.
En tanto, Microsoft emitió en Bruselas un comunicado en el que asegura que "se toma muy en serio este asunto" y pide "sinceras disculpas" por el problema, que espera que no vuelva a suceder.
"Aunque fue resultado de un problema técnico, asumimos la responsabilidad de lo que ha pasado", señaló la empresa.