La tecnología, ¿propicia relaciones más románticas o mata el misterio?
En lo que se refiere al romance, enviar mensajes de texto comúnmente es visto como una forma mínima de comunicación. Está bien para confirmar los planes para cenar este miércoles por la noche pero no tanto para expresar sentimientos más profundos, ¿no?
En la era digital, la tecnología no mata al cortejo, pero para muchas parejas modernas redefine cómo se ve el romance .
Actualmente enviamos mensajes en lugar de hablar, usamos FaceTime en lugar de conversar cara a cara y hojeamos perfiles de citas en línea con la misma velocidad que un catálogo. Es conveniente, pero ¿romántico? No tanto.
Estos hábitos hacen preguntarse si la tecnología obstaculiza el romance real. Seamos honestos: ¿cuántos de nosotros no hemos participado en un intercambio de mensajes calurosos con una persona en quien tenemos algún interés amoroso? Es probable que muchos de los mensajes guardados en tu teléfono sean más íntimos que una típica conversación que tienes con tu pareja en la cama.
Del chat a OKCupid
Desde los primeros días de internet, lo hemos utilizado como herramienta para ampliar nuestros panoramas, a conocer a otras personas y encontrar el amor. Hemos recorrido un largo camino desde aquellas salas de chat, pasando por sitios especializados en citas en línea, hasta llegar a las aplicaciones para smartphones para encontrar pareja.
Con ayuda del GPS del teléfono, las aplicaciones móviles sociales como Blendr, Grindr, Are You Interested? y Plenty of Fish te ayudan a concentrarte en romances o ligues potenciales que estén a la vuelta de la esquina .
Para los más atrevidos, OKCupid lanzó recientemente una aplicación tipo ruleta rusa llamada CrazyBlindDate , que agenda citas, con poco tiempo de anticipación, entre usuarios que casi no se conocen entre sí.
No es exactamente la versión más romántica de un encuentro destinado a suceder, como cuando encuentras a tu alma gemela en una clase de spinning o en la fila de la matiné del cine.
“Aquellos escenarios realmente románticos están algo diluidos hoy en día”, dijo Philip Wang, cofundador de Wong Fu Productions , una empresa que creó una serie de videos llamada Technology Ruins Romance (La tecnología arruina el romance). Gran parte de ese misterio que normalmente asociábamos con el romance “no es tan fuerte como solía ser”, agregó.
El poder de Facebook
Algunos jóvenes solteros actualmente prefieren tener información que misterio. Cuando Jason Austin, un profesional en tecnologías de la información de 29 años, se mostró escéptico por una cita potencial que conoció en línea, hizo lo que cualquiera haría: acudió a Facebook .
“No me sentía cómodo con la información que me decía. Le enviaba un mensaje de texto cuando salía del trabajo, la llamaba y no contestaba, (pero) me enviaba un mensaje de texto en la mañana y decía, ‘¿hey, cómo estuvo tu día ayer?’, lo cual me hizo sospechar. Así que en esa situación en particular, la googleé”.
En Facebook “si lees los comentarios, podrás encontrar detalles sobre esa fotografía, lo que te da detalles sobre esa persona”, dijo.
Pero estas búsquedas en línea pueden tener inconvenientes, dijo la doctora Corinne Weisgerber, profesora de Comunicación en la Universidad St. Edward en Austin, Texas, Estados Unidos. Conocer los antecedentes de alguien antes de la cita significa que puedes saltarte algunos de esos momentos fundacionales de descubrimiento en persona, indicó.
Pero para Michelle Granoski las herramientas digitales mejoraron su noviazgo con su ahora esposo Shawn. Se encontró con el perfil de Shawn en el sitio de citas Plenty of Fish y le gustó su fotografía, así que le envió un mensaje para entablar una conversación.
“Lo busqué en Facebook, y realmente ayudó (…) Si hubiera descubierto su color favorito en línea, no creo que hubiera reaccionado diferente a que fuera en persona”, dijo. Después de hablar por chat durante dos semanas, Shawn manejó poco más de dos horas para conocer a Granoski cuando ella estudiaba la universidad. Pronto ambos tomaban turnos para manejar y verse, y se casaron tres años después.
Romance en Skype
Aunque conocerse en persona siempre será esencial, el concepto de romance evolucionó al punto en el que semanas de mensajes instantáneos o correos electrónicos pueden convertirse en las semillas de una relación.
Ese fue el caso de Cristina Lara, de 20 años, una estudiante universitaria que usa Skype y el correo electrónico para nutrir su relación a larga distancia con su novio, Joshua Mbanusi, quien vive a 500 kilómetros. Desde el comienzo, su noviazgo se desarrolló en medios digitales.
Cuando se conocieron, lo primero que él le pidió fue su dirección de correo electrónico, no su número telefónico. Algunos hubieran tomado esto como una señal de desinterés, pero Lara reconoció que los correos electrónicos frecuentes y amigables eran su forma de demostrar que le gustaba. Eventualmente, le pidió su número, y salieron en su primera cita aproximadamente un mes después.
“Una gran parte de nuestra relación han sido correos electrónicos, mensajes de texto y mensajes en Facebook”, dijo Lara, quien además tiene guardados como recuerdos muchos de sus correos electrónicos y mensajes de texto.
Así que, cuando su novio le 'dijo' que la amaba a través de un mensaje de texto, no fue ideal, pero tampoco fue malo. “Antes de que la clase comenzara, recibí un mensaje de texto de él que decía, ‘te amo’”, dijo. “Es una pena que no ocurriera cuando estábamos físicamente juntos, pero ¿qué le vas a hacer?”.
Su mensaje llegó después de una larga carta que Lara escribió a mano y dejó en su departamento. Lara cree que una nota escrita a mano puede comunicar cosas que un correo electrónico no puede.
Ahora que están alejados, la pareja se esfuerza por ir a verse cuando pueden. Pero mientras tanto, “para mí y para Josh, ser románticos es tener una noche a la semana en la que comemos juntos en Skype”, dijo. “Creo que eso es realmente romántico ”.