Un brazo biónico que te dará fuerza sin necesidad de ir al gym
En el pasado, si querías poder levantar más peso tendrías que haber pasado meses ganando músculo en el gimnasio. Ahora, con una nueva invención de un grupo de estudiantes de Diseño en la Universidad de Pensilvania en Estados Unidos, puedes amarrarte un bícep externo y estás listo.
El dispositivo biónico, llamado el Brazo Titánico, es la creación de cuatro estudiantes de Ingeniería Mecánica quienes, en su último año de universidad, construyeron un exoesqueleto de la parte superior del cuerpo que puede utilizarse en terapia física y trabajos manuales. La creación le ganó a sus inventores 10,000 dólares (129,721 pesos) en la Copa Cornell de Innovación y recientemente fue nominado para el premio Dyson 2013.
El Brazo Titánico se amarra directamente al brazo derecho del usuario para ayudarlo a levantar objetos pesados que el usuario normalmente no podría levantar. Sus inventores creen que será útil para ayudar en la rehabilitación física, tanto para personas que tuvieron lesiones en la parte superior del cuerpo como para aquellos con trastornos musculares-esqueléticos preexistentes.
Los inventores del Brazo Titánico dicen que el exoesqueleto también lo pueden utilizar personas cuyos trabajos requieren levantar cosas pesadas como los trabajadores de almacenes, trabajadores de mudanzas y mensajeros.
“Con el Brazo Titánico, queríamos crear algo que pudiera aumentar la fuerza natural del usuario así como ayudar a que alguien realice terapia física en su propia casa”, dice Elizabeth Beady, una de las inventoras del Brazo Titánico. “Queríamos crear algo que fuera de bajo costo y fácil para que un usuario se lo ponga y amarre a sí mismo”.
Según el Departamento de Trabajo de Estados Unidos, los trastornos de la espalda son una de las principales causas de discapacidad para las personas en sus años de trabajo. El Instituto Americano Nacional de Seguridad y Salud Laboral de Estados Unidos dice que los problemas de la espalda afectan a más de 600,000 empleados cada año con un costo de aproximadamente 50,000 millones de dólares (648,000 millones de pesos) anualmente para la economía estadounidense.
El problema es significativo en otros países: la Organización Mundial de la Salud dice que a nivel mundial, el 37% de los dolores en la espalda baja se debe a lesiones ocurridas en el trabajo.
Beady dice que abordar este problema mientras se prestaba atención a la comodidad del usuario fue uno de los principios primarios de motivación al diseñar el dispositivo: “Queríamos algo que fuera cómodo para el usuario, algo que imita la movilidad y alcance natural del cuerpo, así que definitivamente hicimos muchas pruebas para llegar a donde el diseño se encuentra justo ahora”.
El Brazo Titánico se ata al brazo derecho del usuario con un motor de potencia en la articulación del codo. La extremidad biónica puede levantar aproximadamente 18.1 kilogramos de peso, al aumentar la fuerza natural del usuario. El brazo está hecho predominantemente de aluminio y componentes de acero, y es alimentado por una batería DC.
Así como ayuda a levantar peso, el brazo también puede bloquearse en cualquier posición con un freno de trinquete para mantener estable un objeto sin ningún esfuerzo del usuario.
JD Albert, ingeniero y cofundador de E-Ink, llama al Brazo Titánico “emocionante”, pero añade: “Yo advertiría el hecho de que es un producto muy difícil de lanzar por muchas razones… necesita sentirse bien (y) creo que también hay algunas preocupaciones de seguridad bastante significativas… hablamos de una pieza de maquinaria y al integrarla con una persona tan naturalmente necesitas asegurarte de que no hay forma de lastimar a alguien”.
Aun así, Albert dice que para los ingenieros jóvenes, el Brazo Titánico representa un logro impresionante: “Han logrado combinar una variedad bastante extensa de disciplinas que lidian con el lado mecánico de las cosas (el diseño y lo eléctrico), y el lado del software de las cosas también”.
Beady dice que el equipo del Brazo Titánico tiene la intención de continuar con el trabajo en el exoesqueleto con el punto de vista de llevarlo al mercado algún día: “Definitivamente queremos utilizar nuestros kits de herramientas de ingeniería para mejorar la calidad de vida de aquellos a nuestro alrededor. Creo que es una de las cosas que la tecnología realmente tiene el poder de hacer”.