El joven que hackeó TweetDeck
TweetDeck, la popular aplicación para escritorio de Twitter, fue hackeada sólo porque un joven austriaco experto en computación de 19 años quería usar pequeños corazones.
El miércoles, algo parecido a un virus de Internet se extendió rápidamente a través de la red social Twitter. Pasó de ser un tuit de un corazón ("♥"), un símbolo que fue cargado a través de una línea de código, a un ataque masivo al software de TweetDeck .
Como sucede con cualquier virus, el código obligaba a las cuentas infectadas a compartir el mensaje para esparcirlo por todas partes.
Un joven austriaco llamado Florian (él prefiere Firo) dijo que lo había comenzado todo. Firo, quien se negó a decir su apellido por cuestiones de privacidad, señaló que por la mañana descubrió que el lenguaje HTML “&hearts” crea el símbolo "♥".
A través de un chat por Twitter con CNN, él dijo que sólo estaba experimentando cuando descubrió que al introducir el código en el software de TweetDeck se abría una manera de introducir comandos de programación en un tuit. Sin querer, Firo se había topado con un error en el software.
“No fue un hackeo. Simplemente se trató de un accidente”, afirmó.
Firo hizo varios intentos al añadir el corazón a cada mensaje hasta crear una especie de pop-up en su propio panel de TweetDeck.
Después anunció triunfante: “Vulnerabilidad descubierta en TweetDeck”. Firo avisó a Twitter sobre el error tan pronto como lo encontró. Pero ya era tarde.
Otros en la comunidad de ciberpiratas se dieron cuenta y en breve se produjo un secuestro en masa de la aplicación.
Un mensaje del usuario @derGuruhn fue compartido más de 37,000 veces. Muchos revirtieron la acción de retuit con el fin de acabar con el molesto símbolo . Mucha gente alrededor del mundo se vio afectada.
Pero no hubo daño reportado. Fue inofensiva la pequeña interrupción en Twitter, poco más que una molestia.
Tras el incidente, Twitter anunció que había arreglado el problema. La compañía simplemente pidió los usuarios cerrar su sesión y volver a ingresar.
Lo que respecta a Firo, un estudiante de informática en el Instituto Técnico de Austria, dijo sentirse terrible por lo ocasionado.
“Es horrible que TweetDeck haya cometido ese error”, señaló. “Es pésimo que los hackers se aprovechen. No sé, estoy triste en cierto sentido”.