El dinosaurio Dreadnoughtus schrani, descubierto este jueves en la Patagonia argentina, era uno de los mayores; si no es que el mayor de los animales de tierra que estuvo en nuestro planeta.
Los expertos estiman que en el momento de su existencia, el periodo cretáceo superior hace cerca de 77 millones de años, este gigante medía 25.9 metros de largo y pesaba aproximadamente 65 toneladas.
Entonces, no es de extrañar que los paleontólogos escogieran un nombre que se reduce a “no le teme a nada”. (El segundo nombre es en honor del benefactor y emprendedor de la tecnología, Adam Schran). Si fueras este dinosaurio seguramente no te asustarías ante cualquier criatura, es más, podrías aplastar casi todo con tu cola parecida a un látigo y destruir casi todo con tus pies colosales.
"Dreadnoughtus schrani era sorprendentemente grande”, dijo Kenneth Lacovara, el autor principal del reporte publicado en
Los restos fosilizados de este Dreadnoughtus fueron descubiertos recientemente en el suroeste de la Patagonia de Argentina.
Y piensan que el dinosaurio masivo que fue juntado por el equipo de Lacovara todavía estaba creciendo, según el análisis de los expertos.
Es difícil decir cuánto hubiera crecido este u otro Dreadnoughtus si hubiera madurado completamente. Y, sin una máquina del tiempo, tampoco se puede determinar rápidamente si esta nueva especie era mayor que sus compañeros
En gran parte eso se debe a que otros descubrimientos como este están relativamente incompletos, lo que fuerza a los paleontólogos a estimar con base en un hueso o dos aquí y allá.
"Los
No es el caso del nuevo espécimen Dreadnoughtus, que es otra gran razón; gran siendo la palabra operativa para todo sobre esta criatura, por la que es tan especial.
Aquellos que excavaron el terreno a veces cubierto en nieve y que no está tan lejos de Antártida pudieron ubicar más del 70% de los huesos del Dreadnoughtus, incluida parte de una mandíbula. Compara eso con quizá entre el 3% y el 27% para otros descubrimientos de dinosaurios de este tipo.
Lacovara caracterizó el descubrimiento como “por mucho el mejor ejemplo que tenemos de cualquiera de las criaturas más gigantes que ha pisado el planeta”.
Y no es como los científicos que descubren pequeños huesos de pollo. Una imagen que Lacovara
mostraba a una mujer a un lado de las escápulas del Dreadnoughtus, u omóplatos, ambos más o menos del mismo tamaño. Su húmero, o parte superior del brazo era mayor que el profesor de la Universidad Drexel. La vértebra del cuello medía aproximadamente 0.9 metros de diámetro.Todas estas cosas; desde los fósiles de huesos grandes hasta un solo diente, desde parte de la mandíbula hasta los dedos de los pies y una garra, junto con la tecnología digital podrían ayudar a conocer mucho sobre el Dreadnoughtus y otros titanosaurios que vivían en su época, más allá del hecho de que tenía un cuello de 11.2 metros de largo y una cola de 9.1 metros.
Una cosa que tendría que haber hecho, para estar así de grande, es comer. Mucho. (Y todo eran plantas, probando que tu mamá tiene razón cuando dice que los vegetales pueden hacerte grande y fuerte).
Lacovara cree que el Dreadnoughtus pudo tener “una obsesión de toda la vida con comer”, quizá gastando toda su existencia masticando hojas de árbol gigante tras árbol gigante.
“Cada día se trata de ingerir las suficientes calorías para nutrir este cuerpo del tamaño de una casa”, dijo.