¿El Apple Watch podrá contra la competencia de relojes inteligentes?
Después de que la mayoría de las firmas de tecnología anunciaron los gadgets con los que competirán por el mercado de la tecnología vestible, Apple presentó su reloj inteligente, el cual de acuerdo con analistas tiene amplias posibilidades de tener ventas exitosas, pues conjunta una estética probada con la fuerza de marketing de una marca reconocida.
“Apple tiene un gran poder de marketing para tomar un producto y crear una categoría distinta en el mercado, lo hace popular. El hecho de que Apple haya entrado al mercado de los vestibles le traerá más credibilidad a estos productos y es probable que esto levante toda la categoría. No sólo por la marca, si no por cómo la gente la percibe”, dijo en entrevista la vicepresidenta de análisis en canales estratégicos para la consultora Forrester Research, Julie A. Äsk.
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La importancia del marketing en los dispositivos vestibles será altamente relevante al tratarse una nueva categoría, por lo que según la analista se espera que con el ingreso de Apple a este mercado la competencia por la visibilidad de la marca se estreche.
Según Äsk, las marcas más reconocidas y con mayores presupuestos en esta categoría como Samsung, Sony y la firma de la manzana serán las que logren disputarse el mercado. Mientras que el vicepresidente de tecnología vestible de Intel, Michael Bell, consideró que además del marketing detrás de dispositivo, el éxito de un wearable está en buena parte determinado por su estética.
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“La gente prefiere un gadget que esté a la moda que quiera usar, que uno muy funcional y tecnológico. Debe tener ambas cosas para ser exitoso”, dijo a Expansión durante el evento de desarrolladores de Intel en San Francisco.
Un reloj, la forma indicada
En los últimos años la oferta de dispositivos conocidos también como wearables se dividió en tres categorías según datos de Forrester Research: los enfocados a actividades deportivas, los enfocados a la salud y los relojes inteligentes, siendo estos últimos los que proyectan mayor crecimiento por su utilidad.
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La razón por la que los relojes inteligentes son la categoría con el mejor futuro entre los vestibles es porque la gente revisa su teléfono en promedio 150 veces al día, 50% de los consumidores admiten estar hartos de sacar el smartphone del pantalón o de la bolsa de mano constantemente sobre todo porque entre 50 y 70% de las veces sólo lo toman para ver cosas simples como la hora, explicó Äsk.
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“Estas interacciones, que les llamamos micromomentos, hacen mucho sentido en un dispositivo vestible, un reloj o un Google Glass incluso”, dijo.
Sin embargo queda una preocupación sobre estos gadgets. Äsk dijo que aún está en duda cómo es que las marcas lograrán mantener cautivos a los consumidores de la categoría por medio de programas que les generen beneficios más allá de un dispositivo que les ahorre movimientos para revisar notificaciones.
El riesgo de los wearables es que no enganchen al consumidor por largo tiempo y que el tiempo de vida útil de estos dispositivos se reduzca y se vuelva desechable. La gente tiene que encontrarles un uso real que les haga tanto sentido como un smartphone o una tablet, consideró la analista.
A la fecha, el mercado de la tecnología vestible se valúa en 5,166 millones de dólares y se espera que crezca para alcanzar un valor de 12,642 millones de dólares en 2018, según datos de Statista.