James Bond desprecia 5 mdd por usar ‘smartphone’ Sony
Para el agente secreto internacional James Bond, capaz de salvar al mundo de las peores amenazas, 5 millones de dólares (mdd) no son suficiente razón como para utilizar un teléfono inteligente Z4 de Sony en sus aventuras de espionaje.
Una serie de correos filtrados con mensajes entre empleados de Columbia Pictures y ejecutivos de Sony revelan que la firma de electrónica de consumo japonesa trató de colocar su recién anunciado Z4 en la siguiente cinta de la saga de Bong, 'Spectre'.
Los correos fueron robados en el hackeo que Sony Pictures sufrió a finales de 2014, y recientemente fueron publicados en Wikileaks.
De acuerdo con un primer correo, enviado por el vicepresidente de Mercadotecnia de Consumo, George Leon, Sony estaba dispuesto a pagar casi 28 mdd para aparecer en la película. La inversión incluía 18 mdd en publicidad ATL, 5 mdd en presupuesto de producción y otros 5 mdd más para el actor inglés que interpreta Bond, Daniel Craig.
Sin embargo, el acuerdo entre ambas partes no prosperó, más que por un tema de inversión, la razón de rechazo fue que los smartphones Sony no son tecnología que un agente especial con acceso a gadgets de primer nivel como James Bond usaría.
En un segundo correo electrónico, el presidente de Relaciones y Operaciones Globales de Columbia Pictures, Andrew Gumpert, explicó parte de los motivos para impedir el avance de las negociaciones.
“Más allá del factor $$ (sic), hay un asunto, como debes entender, de creatividad en el que Sam (Mendes, director de la cinta) y Daniel no les gusta el teléfono de Sony para la cinta. La razón subjetiva/objetiva es que James Bond únicamente usa lo ‘mejor’, y en sus mentes los teléfonos Sony no son lo ‘mejor’”, escribió Gumpert.
Sin confirmar un acuerdo, Gumpert describió en el correo que ademas de la propuesta de Sony, la surcoreana había realizado una contraoferta que podría estar rondando los 50 mdd para gastos de marketing, promoción y pagos.
'Spectre' se estrenará en noviembre de 2015. La cinta generó expectativa en México pues parte de la cinta se filmó en el Centro Histórico del Distrito Federal.