Emprendedores quieren hacer del ecommerce un arte
Un smartphone también puede servir como corredor de arte. Desde 2014, las ventas de arte a través de plataformas de comercio electrónico registraron un alza constante y en 2016 sumaron ventas por 3,300 millones de dólares, de acuerdo con el estudio de la consultora del mercado, Hiscox, el cual proyecta que el ecommerce se convertirá en 2020 en una de las plataformas principales para la comercialización de piezas a la par de las galerías.
“En el mundo del arte online, los dispositivos móviles se han convertido en nuestra arma elegida al igual que las redes sociales, para incrementar la influencia y el nivel de persuasión para comunicar que el arte de verdad es magnífico”, dice Robert Read, director de artes de Hiscox en el reporte del comercio electrónico y arte 2016.
A este mundo, que se estima que para 2020 valga 9,600 millones de dólares, es la que busca entrar el mexicano Luis Gómez Arismendi, fundador de la startup de arte online Alart.
“México ocupa más o menos el 30% de las ventas de arte en la región. Sí hay compradores fuertes que ya están acostumbrados a este tipo de dinámicas, desde que se negocia por email directamente con la galería; la gente que compra arte, está cada vez más acostumbrada a interactuar de esta forma”, dijo Gómez, en entrevista con Expansión.
Alart busca convertirse en una plataforma de subastas de arte visual, como fotografía instalación, pintura y escultura, desde un dispositivo móvil; aunque en una primera etapa habrá opción de hacer cita para ver la pieza en persona, la apuesta, es que el cobro se haga de forma electrónica y con facilidades de pago para así abrir a las masas el mercado del arte.
“No es lo mismo pagar 1,000 o 5,000 dólares que 1,000 o 5,000 pesos. Esa es la apuesta, creemos que la gente se puede animar por el hecho de que son precios de oportunidad”, dijo el emprendedor, cuya formación viene del mundo de los museos y acepta que lograr un modelo de negocios, le tomó tiempo.
El formato de subasta en la aplicación será cambiante, pues a diferencia de las subastas de casa como Christies en Nueva York, en las que los interesados conocen el catálogo previamente y pujan por una pieza de forma presencial el día del evento, aquí, se subirá una pieza diferente cada día para que ésta se venda al mejor postor y de forma rápida.
En el recorrido de Gómez y sus socios para lanzar esta aplicación, comentan que pasaron por mentoría de aceleradoras como Founder Institute, Startup México y actualmente, trabajan con el fondo francés, Numa, aunque aún no se han acercado a fondos de capital para levantar una ronda.
“Primero queremos ganar tracción”, dijo.
En el lanzamiento de la aplicación, las piezas disponibles serán en su mayoría de artistas nacionales de escuelas de artes plásticas como La Esmeralda y las escuelas de arte de Ensenada y Yucatán.
“Ellos tienen más necesidad de tener visibilidad en este mercado pues no están en una ciudad como la Ciudad de México que sí tiene un mercado de arte”, dijo.