En el mundo de la tecnología, muchos consideran que los datos son el petróleo del futuro, por su potencial para entrenar nuevas herramientas, como la Inteligencia Artificial; sin embargo, para Sam Altman, fundador y CEO de OpenAI, la verdadera “moneda del futuro” es el poder de cómputo, una visión que explica el interés de sus inversiones en la industria de los chips.
“Creo que el poder de cómputo será la moneda del futuro. Pienso que podría ser el bien más preciado del mundo y creo que deberíamos estar invirtiendo para hacer mucho más poder de cómputo”, comentó Altman en una reciente entrevista con el periodista Lex Fridman.
El ejecutivo aceptó que si bien aumentar el poder de cómputo es uno de los objetivos más importantes para el futuro tecnológico, también se debe tomar en cuenta la problemática energética, pues será necesario generar centros de datos y chips más sustentables, lo cual complica la misión.