A pesar de los avances en la inclusión de mujeres en áreas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), la participación femenina en estos sectores sigue siendo baja en México.
Según el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), solo el 13% de los empleos en estas áreas están ocupados por mujeres, a pesar de que representan alrededor del 38% de la matrícula estudiantil en estas disciplinas, de acuerdo con Unicef.
Esta brecha de género no solo refleja desigualdad, sino que también limita la diversidad de perspectivas y el potencial de innovación en la industria tecnológica. La baja participación femenina responde a múltiples factores, entre ellos la falta de modelos a seguir, estereotipos de género y la ausencia de políticas públicas inclusivas.
Organizaciones como Mujeres en Tech están trabajando para reducir esta brecha a través de iniciativas que fomentan la participación de mujeres en la industria tecnológica. Anaid Sustaita, líder de la organización, explica que su labor se basa en tres pilares: comunidad, alianzas estratégicas y desarrollo profesional.
“Es importante que las mujeres compartan sus historias para inspirar a otras. A través de eventos, mentorías y redes de apoyo, buscamos que las mujeres que ya están en la industria ayuden a otras a recorrer su camino”, comentó Sustaita.
El año pasado, la organización impactó a más de 4,000 mujeres con diversas iniciativas, incluyendo programas de mentoría que conectan a jóvenes universitarias con mujeres líderes en la industria.
Uno de los mayores retos para lograr la inclusión de mujeres en estos sectores es la falta de compromiso por parte de algunas empresas para implementar políticas de diversidad e inclusión. Aunque el panorama global muestra un retroceso en las inversiones para fomentar la diversidad, Sustaita destaca que en México aún existe interés por parte de las empresas para colaborar con organizaciones que promuevan la equidad de género.
“Trabajar con las empresas es clave para que mantengan estos temas en su agenda. Buscamos que los programas de diversidad no solo sean una cuota, sino una oportunidad para que las mujeres se desarrollen con base en sus capacidades”, señaló.
Además, la flexibilidad laboral, las políticas de maternidad y la capacitación constante son elementos esenciales para facilitar la permanencia de las mujeres en la industria tecnológica. Empresas como Cirion Technologies han implementado estrategias para aumentar la participación femenina, incluyendo programas de mentoría, políticas de trabajo flexible y apoyo a la formación técnica.
“La presencia de las mujeres en la tecnología no es solo una cuestión de representación, sino una necesidad para el desarrollo de soluciones innovadoras e inclusivas para la sociedad”, destacó Cibele Giarrante, directora de Recursos Humanos de Cirion.
Otro desafío es la falta de referentes femeninos en STEM desde las etapas educativas. Muchas jóvenes que muestran interés por la ciencia y la tecnología lo pierden en la adolescencia por la ausencia de modelos a seguir o por la percepción de que estas áreas son exclusivas para hombres.
Para combatir esto, Mujeres en Tech lanzó en 2023 un programa de mentoría para estudiantes universitarias que conecta a las participantes con mujeres profesionales en la industria. La iniciativa no solo brinda herramientas técnicas, sino que también refuerza la confianza y la seguridad de las jóvenes.
“Cuando las chicas ven que otras mujeres han logrado construir una carrera en tecnología, se sienten más motivadas para intentarlo. Es fundamental acercar a las niñas y jóvenes a estos modelos para que puedan visualizarse en estos roles”, explicó Sustaita.
La inclusión de mujeres no solo es una cuestión de equidad, sino una necesidad para construir soluciones más diversas e innovadoras que atiendan a toda la sociedad. La colaboración entre organizaciones, empresas y el sector educativo será clave para fomentar la participación femenina y reducir la brecha de género.
“Cada vez hay más oportunidades en el mercado mexicano para las mujeres en tecnología. Lo que necesitamos es acercar esas oportunidades al talento que ya existe y asegurarnos de que las mujeres estén preparadas para aprovecharlas”, indicó Sustaita.
