Esta medida busca atender la principal preocupación de Washington de que los datos personales puedan ser exportados con fines de vigilancia o propaganda proveniente de China.
"Será inspeccionado y reentrenado por completo por el proveedor de seguridad en lo que respecta a los datos de los usuarios estadounidenses, y luego será operado por esa entidad estadounidense", refirió un vocero de la Casa Blanca.
En esta modalidad, ByteDance conservaría la propiedad intelectual de la tecnológica y simplemente otorgaría a Oracle una licencia de uso exclusiva para el mercado estadounidense. Si bien esto limitaría la injerencia directa de la compañía china, deja abierta la puerta a una relación contractual que contradice, al menos en parte, la intención de cortar totalmente los lazos con la matriz.
Las últimas actualizaciones se produjeron después de que Trump celebrara el progreso con el presidente chino Xi Jinping en temas que incluyen TikTok, tras la segunda conversación telefónica entre ambos líderes desde el regreso de Trump a la presidencia.
Se espera que Trump firme esta semana una orden ejecutiva declarando que los términos del acuerdo de TikTok cumplen con las necesidades de seguridad nacional de Estados Unidos.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, dijo a Fox News que "habrá siete asientos en el consejo que controla la aplicación en Estados Unidos, y seis de esos asientos serán ocupados por estadounidenses".
Trump añadió por separado que el magnate de los medios Rupert Murdoch y su hijo mayor Lachlan podrían estar entre los inversores que tomarán el control de TikTok en Estados Unidos.
El caso muestra hasta dónde está dispuesto a llegar Washington para controlar las tecnologías digitales que considera estratégicas. Pero hasta que China y las autoridades estadounidenses no den las aprobaciones finales, el futuro sigue abierto.