La investigación de Canva, que analizó a 1,000 personas emprendedoras de entre 18 a 65 años, todas con negocios que venden o se promocionan online, evidencia un fenómeno conocido como mobile-first, en el que el teléfono es un estudio de contenido, oficina y punto de venta al mismo tiempo.
La digitalización del emprendimiento se basa principalmente en WhatsApp y las redes sociales. El estudio reveló que 72% de la Nenis y 75% de emprendedores individuales Pymes, usan estos canales como vía principal de promoción.
Además, entre un 74% y 80% de los emprendimientos venden directamente a través de redes sociales, consolidando un modelo de comercio sin intermediarios, inmediato y visual. WhatsApp es el canal de cierre, pues alrededor del 70% lo utiliza para concretar ventas y comunicaciones con clientes.
“El contenido visual es hoy la columna vertebral del crecimiento digital”, porque los negocios “viven, crecen y se diferencian gracias al contenido visual que crean todos los días”, señaló Aurora Morales, directora de marketing de Canva para México.
Para Canva, esta tendencia representa un cambio estructural en el que el contacto y la confianza –antes construidos cara a cara– ahora se afianzan en mensajes, fotografías y videos. La formas de contenido más utilizadas son:
*Imágenes estáticas y fotografías editadas, usadas por el 79% a 83%, según el tamaño del negocio.
*Videos breves para TikTok o Reels, que emplea entre el 49% y 69% de los negocios.
Las Nenis, pese a ser los negocios más jóvenes y con ingresos más bajos —en promedio 16,611 pesos mensuales— son quienes más invierten proporcionalmente en marketing, con alrededor de 20% de sus ingresos destinados a ello. Los emprendedores individuales y Pymes, cuyos ingresos mensuales promedio se calculan en 42,228 pesos, destinan alrededor de 15% para el mismo fin.
Entre los negocios más consolidados, con ingresos cercanos a los 139,817 pesos mensuales, este mismo 15% representa presupuestos más amplios, lo que les permite producir contenido más elaborado y diversificar canales.
Este impulso a la autopromoción se relaciona con otro hallazgo: el emprendimiento mexicano es joven. La mayor parte de quienes lideran estos negocios tienen entre 18 y 34 años, especialmente en el caso de las Nenis. La profesionalización aparece conforme crece la operación: los emprendimientos consolidados son encabezados con mayor frecuencia por personas de entre 35 y 44 años, con estudios formales más altos y estructuras internas más sólidas.
En todos los casos, la creación visual ha pasado de ser un “plus” a un requisito básico. No contar con redes activas o con contenido de calidad puede significar, simplemente, no vender.