La 'Mujer Maravilla' hizo el trabajo que 'Superman' no pudo

La cura para la envidia a Marvel DC Entertainment llegó en forma de Mujer Maravilla, una poderosa historia original que se compromete a llegar al corazón del género mientras sigue entregando la acción requerida. Como un puente del equipo de la Liga de la Justicia, esta superheroína puso el universo cinematográfico de DC Comics en nuevas alturas.

Por supuesto, la barra no había sido puesta particularmente arriba por Batman v. Superman: la Liga de la Justicia -donde apareció brevemente la Mujer Maravilla- o Suicide Squad.

La directora Patty Jenkins, en cambio, volvió al punto de partida usando una fotografía de 100 años de antigüedad que apareció en la antigua película para detallar la historia de Diana (interpretada por Gal Gadot), princesa de Temiscira, descendiente de Zeus y de la reina de todas las amazonas (interpretada por Connie Nielsen).

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Entrenada como una guerrera por su tía (interpretada por Robin Wright), el destino de Diana da un giro inesperado cuando el piloto y espía Steve Trevor (interpretado por Chris Pine) estrella su avión en el mar, llevando a sus vidas abruptamente la Primera Guerra Mundial.

Como muchas películas han aprendido, históricamente hablando, los alemanes son buenos chicos malos, incluso cuando no son nazis. En este caso, se trata del pícaro general Ludendorff (interpretado por Danny Huston), que intenta usar atroces y mortales armas para prolongar la guerra en vísperas de un armisticio, llevando a Diana a un viaje, junto con Steve, en el que espera encontrar a Ares, dios de la guerra, para terminar con el tormento del mundo.

Esto crea un escenario muy poco estándar, presentando a Diana como un personaje muy ingenuo de ojos muy abiertos en una tierra extraña, preguntándose cómo es posible que una mujer de principios de siglo 20 pueda luchar con esos grandes vestidos de tela de la época y preguntándole a Trevor cómo se califica en términos de masculinidad.

Trevor reúne un equipo para que se una a Diana en la misión de detener a Ludendorff y ella, no accidentalmente, muestra los poderes que gradualmente ha descubierto. La película se desarrolla en esta trama luego de que Diana se despidiera de las Amazonas, pero es consistentemente entretenida, impulsada en gran parte por la presencia de la estrella israelí, lo que hace que sea mitológicamente posible.

Sin embargo, algo más significativo es que el tono se siente bien. El periodo también suaviza el divertido papel masculino de Pine, mientras que este ofrece un encanto no forzado a la interacción de la pareja.

Jenkins también capitalizó el atletismo del personaje, coreografiando las escenas de peleas como si fueran un ballet. La cámara lenta puede usualmente adormecer este contexto, pero aquí —aumentado por la poderosa música de Hans Zimmer y Junkie XL— le da una cualidad épica a aquellas secuencias un poco como la película “300”. (Esta fue dirigida por Zack Snyder, que actuó como productor en la Mujer Maravilla.)

Aunque sea prematuro decir que la Mujer Maravilla salvó el verano que tuvo un comienzo moribundo , el cociente de las palomitas de la película le debe proporcionar a la industria del cine una inyección de energía. También ha evocado más esperanzas para la Liga de la Justicia que las que existían con solo con Batman v Superman.

Dados los incómodos aspectos de la historia de fondo del vulnerable personaje (Trevor dijo que el linaje de Diana era “puro”); sus tontos accesorios, incluyendo un laso mágico y un avión invisible (sabiamente omitido), y los límites de los shows de la década de los 70, transformar a la Mujer Maravilla en ese tipo de atracción en la pantalla grande no es un logro pequeño. Además de eso, puede que esté entre los más populares disfraces en el próximo Comic-Con.

Aquellos familiarizados con los lemas de los cómics saben eso de que "esto sería un gran trabajo para Supermán". Pero para sacar a DC de su racha de mala suerte, el hombre adecuado para el trabajo al parecer es una mujer.

La Mujer Maravilla se estrenó el 2 de junio en Estados Unidos y superó las expectativas en taquilla, logrando un estimado de 100,5 millones de dólares durante su estreno en América del Norte este fin de semana.

Eso convierte a la película de superhéroes protagonizada por Gal Gadot y dirigida por Patty Jenkins en el mejor estreno de una directora. El récord anterior, Cincuenta sombras de Grey, recaudó 85,2 millones de dólares en 2015.