Como ocurre en muchos países, es el último grupo etario que aún no tiene acceso a esta inmunización.
En dos votaciones, los 21 expertos consideraron unánimemente que los beneficios de vacunar a esta franja supera los riesgos.
Partiendo de estos dictámenes favorables, la agencia estadounidense de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés), cuyas decisiones son una referencia a nivel internacional, podría dar su autorización oficial proximamente.
Después de ello, se enviarían inmediatamente unas 10 millones de dosis a las distintas regiones del país, a las que seguirían millones más en las semanas siguientes, informó el gobierno estadounidense.
La vacunación podría comenzar la semana del 20 de junio, una vez que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) dieran su visto bueno. Los expertos de los CDC se reunirán el viernes y el sábado.
Dosis y efectividad
La dosis se ha adaptado: una cuarta parte de la suministrada a los adultos para la vacuna de Moderna (25 microgramos en vez de 100) y una décima para el caso de Pfizer (3 microgramos contra 30).
La principal diferencia entre los dos productos es el número de inyecciones necesarias para la inmunización: la vacuna de Moderna seguirá administrándose en dos dosis, con un mes de intervalo. Una representante de la compañía matizó, sin embargo, que se harán estudios sobre una tercera como refuerzo.