La Redonda, vino ‘boutique’ para México
El viñedo se extiende hasta donde alcanza mi vista. La vinícola de La Redonda, en Querétaro, con una extensión de 160 hectáreas y a tan sólo 160 km de la Ciudad de México, invade con sus aromas, sabores y sensaciones , al inicio de su periodo de vendimia, al cual asisten cerca de 5,000 personas anualmente.
Con una producción anual de 100,000 botellas, esta casa enológica se aleja de la tradicional franja de los viñedos de Baja California y del Valle de Guadalupe, para crear una vinícola ‘boutique', especializada en vinos suaves, semisecos, dulces y rosados, que alcanza la zona del altiplano mexicano.
"El vino es la única obra de arte que se puede beber", dice Claudio Bortoluz Orlandi, presidente de esta vinícola, entre pequeños sorbos de su más reciente creación, una mezcla entre cavernet Sauvignon y Merlot, conocido comercialmente como Sierra Gorda.
A pesar de tener zonas tan vastas para el cultivo de la vid, Mexico ocupa la posición 65 entre los consumidores de vino en el mundo con 5 1/3 botellas en promedio por año. Hay 100,000 consumidores frecuentes (varias veces por mes), 300,000 consumen dos veces por año y un millón de consumidores toman vino una vez por año, de acuerdo a las cifras recopiladas por la Asociación Nacional de Vitivinicultores.
"Es muy importante que los habitantes de México empiecen a consumir vinos regionales, que se adapten a su comida y sus costumbres. La comida mexicana es una de las cinco mejores de todo el mundo y, por lo tanto, puede haber una gran variedad de vinos que se puedan combinar desde los chiles rellenos hasta los tacos de carnitas ", comenta Claudio Bortoluz, quien comercializa desde 2005 sus vinos, destinados principalmente a San Luis Potosí, Querétaro, Hidalgo y en restaurantes especializados en la Ciudad de México
Entre plantíos de Merlot, Cabernet Sauvignon y Malbec para vinos tintos, y Chenin Blanc y Trebbiano con sus variedades de uvas blancas, la zona de "La Redonda" ofrece paseos guiados a los viñedos, a la enoteca y a sus plantas de producción, convirtiéndose en primer conjunto ecoturístico de la región con estas actividades.
Dentro de Querétaro, existen otras rutas especializadas en el vino, como la ruta de Freixenet, la Azteca e, incluso, todo un museo dedicado al queso y al vino.
¿Existe el vino perfecto?
Entre el pisado de la uva y una representación teatral que muestra los orígenes de este producto en México, la pregunta sobre el vino perfecto se suelta al aire entre comensales, directivos y pequeños soumellier en potencia.
"No existe el vino perfecto, como no existe la mujer perfecta ni la comida perfecta. El mejor vino es el que más nos gusta. Se intenta producir el mejor vino, pero siempre se tiene que dirigir hacia un tipo determinado de gente", asegura Bortoluz. .
"No creo que exista", dice Isabel Chavarín, chef ejecutiva del viñedo, "hay tantas variedades de uva que atacan distintos puntos de la lengua que no es posible encontrar esa perfección; probablemente estás de humor cuando hace calor para un tipo de vino que cuando hace frío, te gustaría otro".
Para finalizar, el secretario de turismo de Querétaro, Mauricio Salmón, comparte su visión sobre la calidad en el vino: "Por ahí me decía mi abuelo que el vino bueno es el que te gusta, entonces siempre habrá paladares para cualquier tipo de vino; el mejor vino es al cual se le tuvo mucho cuidado en su preparación, desde la crianza, su guarda y hasta su comercialización".
Viñedos La Redonda se encuentra dentro del llamado "Corredor Vitivinícola de Querétaro", y está ubicado en el km 33.5 de la carretera San Juan del Río a Ezequiel Montes, en el municipio de Ezequiel Montes. La mayoría de sus vinos tradicionales tienen un precio base de 120 pesos, mientras que los “premium”, alcanzan los 300 pesos.
El consumo de vinos en México es de 2.1 millones de cajas anuales; de esa cantidad, el 60% corresponde a importaciones, de acuerdo a la Asociación Nacional de Vitivinicultores