Tequila Siete Leguas, 70 años de Naturaleza Artesanal

Casa Siete Leguas considera que en su naturaleza está “creer y el confiar”, pero también el desafiar para mejorar, por lo que con motivo de su aniversario, ha creado una nueva botella de 1750 mililitros, que se agrega a las distintas presentaciones del tequila de la marca.

El tequila es una bebida que sobresale por su identidad mexicana y Casa Siete Leguas ha preservado una tradición en la que el proceso se basa en su Naturaleza Artesanal para conseguir un sabor distintivo y la calidad que ha trascendido de generación en generación.

En el proceso de producción, el primer paso es la siembra del Agave Azul Tequilana Weber en Atotonilco el Alto, Jalisco. Después de siete años aproximadamente, el agave llega a la madurez y es el momento para que los jimadores hagan su magia y retiren las pencas para seleccionar las piñas de mejor calidad.

La cocción es otra parte importante del procedimiento, y para ello el partir las piñas a la mitad permite que la cocción sea uniforme en los clásicos hornos de mampostería.

Para la molienda de estas piñas, en Casa Siete Leguas utilizan la Tahona o molino de piedra, así como un molino mecánico; mientras que para fermentar se ocupan tanques expuestos y sin levaduras añadidas, lo cual permite aromas y sabores únicos.

Finalmente, en la destilación del Tequila Siete Leguas, utilizan pequeños alambiques de cobre que brindan su sabor característico.

De esta manera, Casa Siete Leguas gracias a sus procesos tradicionales y artesanales logra un resultado que potencia el aroma y sabor natural y puro del agave transformado en la bebida tradicional mexicana.

Evita el exceso. Sólo para mayores de 18 años.