La Cofece pide revisar esquemas de protección en calzado, textil y acero
La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) recomendó a México revisar los esquemas de protección a sectores del calzado, textil y acero, así como procurar la asignación eficiente de cupos, debido a que esto afecta la libre competencia en los mercados y lastima al consumidor.
"Sería deseable no mantener niveles de protección elevados respecto de aquellos productos que nuestros socios comerciales no producen o no abastecen en condiciones competitivas", indica el regulador en el documento política comercial con visión de competencia junio 2017 publicado este viernes.
La Cofece argumenta que en el caso del calzado, se impuso a partir de septiembre de 2014, un mecanismo de precios estimados que funciona como un precio de referencia en la importación y tiene el objetivo de evitar el ingreso a territorio nacional de productos, en este caso calzado, a un precio subvaluado.
"La medida implica el depósito de una garantía que se realiza en efectivo a una cuenta alterna, y que es devuelto después de un tiempo
al importador. Ese pago adicional se calcula con base en el arancel y, en su caso, la cuota compensatoria, respecto del monto que resultaría de la diferencia del precio declarado del bien en la aduana —cuando éste es inferior— y el precio estimado. La devolución se realiza una vez que se comprueba que el bien importado no presentaba subvaluación", indica el regulador.
Poco después este esquema se replicó este esquema en los sectores textil y de confección; sin embargo, esta y otras medidas pueden impedir, restringir o encarecer la importación de productos, afectando con ello el proceso de libre concurrencia y competencia en estos mercados.
En el caso del acero, este sector se ha visto afectado por una disminución en la demanda y un exceso mundial de capacidad productiva, así como por una perspectiva generalizada de bajo crecimiento económico.
Ante esto, en 2015, el gobierno federal decidió incrementar el arancel de importación de fracciones arancelarias de acero, relacionadas con planchón, placa de hoja, placa en rollo, lámina rolada en frío, lámina rolada en caliente y alambrón.
También se han implementado otras medidas de forma simultánea tales como aranceles, cuotas antidumping y mecanismos de supervisión que, si bien no todas se aplican de manera conjunta para un mismo producto, han intensificado la protección al sector.
“Aunque los objetivos de cada medida son distintos, todos parecen perseguir la misma finalidad de limitar la competencia del exterior, lo que podría generar ineficiencias importantes al tratarse de insumos básicos para múltiples cadenas productivas”, indica la Cofece.
El regulador de la competencia agrega que los aranceles y las cuotas compensatorias tienen un impacto directo en el bienestar de los consumidores, pues restringen la oferta, disminuyen la presión competitiva sobre los precios internos y merman la competencia en los mercados.
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"Es imprescindible que estos instrumentos, de aplicarse, tengan un sustento claro de política pública, sin dañar el proceso de competencia", dice el organismo en un documento.
En el caso del textil y el vestido, la Cofece recomienda hacer una valoración en la desaceleración y suspensión de la deducción de impuestos, así como los precios estimados de las aduanas.
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Para el caso del acero, la Cofece recomienda proteger el sector con cuotas compensatorias y alza en aranceles NMF (nación más favorecida) de un 15%.
De acuerdo con el documento, sería deseable no mantener niveles de protección elevados respecto de aquellos productos que nuestros socios no producen o no abastecen en condiciones competitivas.
"Es importante que podamos hacer uso y aprovechar las fuentes de abasto más competitivas alrededor el mundo. Sobre todo tratándose de bienes de consumo que representen una proporción significativa en el gasto de las familias mexicanas, o de un insumo relevante para los procesos productivos", detalla la Cofece.
