El auge del bitcoin amenaza al medio ambiente

El aumento fenomenal del bitcoin de este año podría estar enriqueciendo a los especuladores, pero algunos observadores dicen que es terrible para el medio ambiente.

El bitcoin, que alguna vez fue rechazado por ser del dominio de criminales, ha comenzado a atraer a inversionistas comunes. Su precio ha aumentado de menos de 1,000 dólares al inicio del año a 15,000.

Los críticos dicen que la criptodivisa es un “fraude” y advierten de una burbuja. Los ambientalistas se preocupan por otro riesgo: que está dañando seriamente los esfuerzos por combatir el cambio climático.

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"El bitcoin está desacelerando el esfuerzo por lograr una rápida transición lejos de los combustibles fósiles”, dijo el meteorólogo Eric Holthaus es un artículo en el sitio de noticias ambientales Gist esta semana.

A diferencia del dólar o la libra, estas “monedas” virtuales no están ligadas a un banco central. En cambio, l os bitcoins se “minan” (crear y respaldar) en computadoras en enormes centros de información que consumen una cantidad impensable de energía.

nullBitcoin usa cerca de 32 terawatts de energía cada año, suficiente para dar energía a cerca de tres millones de viviendas estadounidenses, de acuerdo con el Índice de Consumo de Energía de Bitcoin, publicado por Digiconomist, sitio web enfocado a las monedas digitales.

En comparación, procesar las miles de millones de transacciones Visa que tienen lugar cada año consume lo mismo que solo 50,000 viviendas estadounidenses, de acuerdo con Digiconomist.

Lo más preocupante es que la demanda energética de bitcoin aumentará.

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"Mientras crece el bitcoin, los problemas matemáticos que tienen que resolver las computadoras para generar más bitcoins se harán cada vez más complejos”, lo que significa que se necesitará más poder de procesamiento, escribió Holthaus.

Y también hizo un pronóstico alarmante: sin un cambio significativo en el modo de procesar transacciones, el bitcoin podría consumir suficiente electricidad como para suministrar a todo Estados Unidos para mediados de 2019.

Seis meses más tarde, la demanda podría equivaler al consumo energético del mundo.

El hecho de que la mayoría de los bitcoins se minan en China también impulsa las preocupaciones ambientales.

El interior del país ha probado ser atractivo para los centros de información que se requieren para minar bitcoins pues “la electricidad y el terreno son muy baratos”, escribieron investigadores de la Universidad Cambridge en un estudio reciente.

Gran parte de la electricidad del interior de China proviene de plantas energéticas de carbón que fueron construidas anticipando grandes proyectos de construcción que nunca sucedieron, de acuerdo con los investigadores.

Digiconomist reportó que las demandas energéticas de una mina bitcoin que visitó en Mongolia eran equivalentes a la energía necesaria para volar un Boeing 747.

Los grandes mineros de bitcoin han defendido sus operaciones, diciendo a los investigadores de Cambridge que ellos creen que su impacto ambiental palidece en comparación con el de la extracción de recursos naturales, tales como el petróleo.

Y se están adoptando fuentes de poder más amigables con el medio ambiente. Por ejemplo HydroMiner, con sede en Viena, usa energía hidroeléctrica para sus operaciones de bitcoin.

Pero algunos expertos son muy pesimistas sobre el futuro.

La Cámara de Comercio de Chicago y la Bolsa de Valores de Chicago (CME) permitirán a los inversionistas iniciar las apuestas sobre el precio futuro del bitcoin a finales de este mes.

Se espera que esto impulse una oleada de interés de los grandes gestores de dinero que hasta ahora se han quedado al margen de la fiesta bitcoin.La mayor demanda de la divisa digital probablemente aumente aún más la necesidad energética.

"Los futuros de la CME podrían institucionalizar al bitcoin, lo que sería desastroso (para el medio ambiente)”, dijo John Quiggin, profesor de economía de la Universidad de Queensland.

Quiggin cree que los legisladores no serían capaces de ignorar las repercusiones por mucho tiempo.

"Algo debe hacerse pronto”, dijo.