Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

La tecnología juega un papel clave en el empoderamiento femenino

Internet abre el mundo el mundo a las mujeres y les brinda la oportunidad de aprender y de crecer, dicen especialistas en el Women’s Forum.
mié 27 abril 2016 11:23 PM
La tecnología no discrimina entre género ni niveles económicos.
Apoyo La tecnología no discrimina entre género ni niveles económicos.

La última encuesta de la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI) indica que la cobertura de internet en México es de 51%, lo cual ha empoderado a las mujeres y por ende, ha sido un catalizador de la economía del país, en la última década.

Durante la mesa de debate México en la economía de la tecnología del Women’s Forum México 2016, María Teresa Arnal, CEO de J. Walter Thompson, aseguró que la tecnología juega un papel clave en el empoderamiento femenino. “Cuando tú le das a una mujer un smarthphone le cambias la vida porque le das libertad y acceso a la información”.

Tener un browser o un buscador, dijo Arnal, te abre el mundo y te brinda la oportunidad de aprender y de crecer. “El acceso a la información no empodera a hombres o a mujeres, nos empodera a todos”, aseguró.

“La tecnología es un gran ecualizador, no discrimina entre género ni niveles económicos”, dijo Verónica Elizondo Ortiz, CIO de Sigma Alimentos, quien puso sobre la mesa la necesidad de reducir la brecha de acceso digital, sobre todo a partir de un tema de leyes y regulación.

A pesar de que la agenda digital del Gobierno Federal ha fortalecido a México poniendo en la mira la necesidad del acceso a la información, los panelistas insistieron sobre la urgencia de acelerar este proceso. “El acceso a la información democratiza a un país, por ello la agenda digital debe ser la principal de las preocupaciones”, dijo Elizondo.

México tiene todo para ser una potencia digital. Es la segunda economía más grande de Latinoamérica y, sin embargo, es la número 126 de 145 países que mide el Foro Económico Mundial en participación económica de mujeres.

Publicidad

“No hay un solo país en el continente americano que esté por debajo de nosotros”, dijo Elizondo. “Si no estamos todos conectados no vamos a tener el nivel de innovación que necesitamos”.

Arnal afirmó que las empresas del sector tecnológico están avanzando, pero siguen dependiendo del acceso que los clientes tengan a la tecnología. “Es un círculo básico para elevar la penetración”. La diversidad puede generar innovación porque la innovación se desprende de la diversidad de opiniones.

Respecto a la brecha generacional, que comúnmente se cree que es parte de la distancia que toman algunas personas para adoptar nuevas tecnología, Daniel Gómez, director de Solben, una empresa de soluciones para el sector energético, dijo que la edad es tan solo un número y no una limitante. “La adopción de nuevas herramientas depende de una limitante personal, es decisión de cada persona estar dispuesto a aprender”.

Tradicionalmente las mujeres se han sentido lejanas a la tecnología, pero esto está cambiando con la llegada de nuevas generaciones, aseguró Arnal. “Cada vez hay más mujeres en carreras de ciencias tecnológicas, ingeniería y matemáticas están par a par con mujeres y hombres”.

Los panelistas coincidieron en la necesidad de crear roll models que inspiren a más mujeres a conseguir sus metas en el camino de la innovación, y la importancia de impulsar el desarrollo de nuevas empresas de base tecnológica como Solben, de Daniel Gómez, quien tiene en su planta laboral a un 50% de mujeres.

“Hay una gran oportunidad de invertir en el sector tecnológico porque hay grandes carencias a las que podemos darle solución”, dijo Gómez. “Quien resuelva esa necesidad o problema tendrá un servicio que la gente estará dispuesto a pagar por él”, dice Gómez.

El panel cerró concluyó con una visión positiva a futuro, de un país donde pueden generarse más negocios, más ideas y sobre todo, más innovación.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad