Michel Temer libra riesgo de perder la presidencia de Brasil
El Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil desechó este viernes un caso que amenazaba con poner fin a la presidencia de Michel Temer por acusaciones de haber recibido financiamiento ilegal en la campaña de 2014, cuando era compañero de fórmula de la destituida mandataria Dilma Rousseff.
La decisión es una victoria para el asediado mandatario, quien aún debe enfrentar una investigación por corrupción.
"No podemos cambiar al presidente de la república todo el tiempo, ni siquiera si la gente así lo quiere", dijo el presidente del TSE, Gilmar Mendes. El juez, que había respaldado la destitución de Rousseff, sostuvo que el país no debería esperar que la corte resuelva la actual crisis política.
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El TSE decidió desestimar la causa contra la fórmula Rousseff-Temer con una votación de 4-3, lo que evitó la anulación de la elección y la destitución del actual mandatario, quien asumió en lugar de la expresidenta en medio de la peor recesión de Brasil en la historia.
La decisión del TSE ayudará a Temer a recuperar aliados clave en su coalición que respaldarán la aprobación de la reforma fiscal en el Congreso. Las medidas de austeridad buscan controlar el déficit fiscal y restaurar la confianza de los inversores.
Pese a esta victoria, Temer enfrentaría cargos de obstrucción de la justicia y de corrupción por acusaciones de haber aprobado el soborno de un potencial testigo en la pesquisa por corrupción ‘Operación Lavado de Autos’. En mayo pasado, el Supremo Tribunal Federal autorizó una investigación al mandatario.
Temer, un tercio de su gabinete y decenas de legisladores son investigados por corrupción, lo que pone en riesgo la aprobación en el Congreso de medidas de austeridad que quiere el Gobierno.
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Este jueves, el TSE votó 4-3 para no incluir el testimonio de ejecutivos de Odebrecht SA, después de que el juez Mendes dijo que cualquier fallo tendría que tomar en cuenta la estabilidad de Brasil y no debería obligar a Temer a renunciar por una razón menor o injustificada.
La exclusión de esa evidencia fortaleció los argumentos de la defensa de Temer.