A 9 días de asumir el poder, Trump habla de México... y desata reacciones

Nueve días antes de asumir el poder en Estados Unidos, el presidente electo de ese país, Donald Trump, dio su primera conferencia de prensa ante medios en la que insistió en la construcción de un muro en la frontera con México y en hacer que el gobierno mexicano pague por él.

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Tales declaraciones, que representan una continuación de la retórica que el republicano utilizó en su campaña hacia la Casa Blanca, no tardaron en generar reacciones por parte de diferentes actores políticos mexicanos.

El expresidente Vicente Fox, por ejemplo, escribió en Twitter que México no pagará por el “estúpido muro” promovido por Trump, a quien tachó de ser un “bully” que quiere edificar “un monumento a su ego” y a quien no se le debe tener miedo.

En la capital mexicana, el representante de México ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Alfonso de Alba, dijo que los muros fronterizos no garantizan la seguridad y que la región debe destacar los beneficios de la migración.

“En el marco de la OEA, estamos trabajando el tema de migración y refugio desde una perspectiva más amplia, y justamente el interés que tenemos es que se vea como un tema que afecta los derechos humanos de los migrantes, también tiene implicaciones económicas que se reconozca claramente que sus aportaciones no son sólo para el país de origen, sino también para el país destino y reconociendo preocupaciones de seguridad en la fronteras y facilitación de flujos. Nunca hemos creído que los muros sirvan para esos propósitos”, explicó.

Ante reporteros, en el marco de la reunión del cuerpo diplomático que se realiza en la Ciudad de México, De Alba señaló que el canciller Luis Videgaray dio instrucciones para que embajadores y cónsules refuercen la protección a los migrantes mexicanos en Estados Unidos.

“No son delincuentes, son personas que han contribuido grandemente al crecimiento y a la cultura de Estados Unidos. El planteamiento general es de protección y promoción de los derechos de los migrantes y, al mismo tiempo, un desarrollo de flujos ordenados”, dijo.

Dentro de la misma reunión, el cónsul de México en Orlando, Juan Sabines, describió como "una grosería" la intención de Trump de levantar un muro fronterizo.

"A mí se me hace algo absurdo, por supuesto, es una grosería, cuando escuchamos al secretario (de Gobernación, Miguel Ángel) Osorio hablar a favor de la frontera sur, de darle mayor fortaleza a la comunidad centroamericana; en lugar de hacer muros, hacer puentes. Es lo que hemos visto en estos días", dijo.

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En el Congreso, senadores panistas señalaron que México no se preparó para el tema de las deportaciones, pues la realidad es que la amenaza de Trump implica 3 millones de personas retornadas, mientras que en la administración de Barack Obama hubo 2.8 millones.

Ante esto, el legislador Juan Carlos Romero Hicks señaló que están diseñando una estrategia llamada Operación Monarca, con la que buscan proporcionar asistencia legal y educativa a los mexicanos que pudieran ser deportados.

Gabriela Cuevas, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, sostuvo que México no debe tener miedo a Trump, sino a no actuar para defenderse de las políticas que lleve a cabo.

"Queremos empujar una política migratoria, una gestión migratoria mucho más completa que nos permita atender de una mejor manera y en primer lugar por supuesto a los mexicanos, el retorno a los mexicanos en sus comunidades de origen", afirmó.

Trump asumirá el poder el próximo 20 de enero. Durante su campaña, también prometió realizar expulsiones masivas de migrantes indocumentados y obligar a que México y Canadá renegocien el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pues considera que ha sido perjudicial para Estados Unidos.

Con información de José Roberto Cisneros.