¿Cómo hizo Apple para pagar solo 0.005% de impuestos sobre sus ganancias?
¿Por qué la Unión Europea está buscando que Apple pague más de 14,000 millones de dólares en impuestos supuestamente vencidos?
Tengan esto en cuenta: en 2014, la empresa gigante pagó apenas 50 dólares de impuestos por cada millón que ganó con las ventas de iPhones e iPads a la mayor parte del mundo, sin contar Estados Unidos. Eso representa una tasa de interés de tan solo 0.005%. Sí, leíste bien.
¿Cómo fue que eso pudo pasar?
Desde hace décadas, Apple ha canalizado la mayoría de sus ganancias de Europa, Medio Oriente, África e India a través de Irlanda. No es nada del otro mundo. Otras empresas lo hacen .
Pero en los contratos que la empresa celebró con el gobierno irlandés, que se remontan a 1991, se permitió que estas ganancias se dividieran entre su oficina en Irlanda y una oficina principal de Apple que existía solo en teoría.
Apple pagó la tasa de interés fiscal estándar de Irlanda sobre las ganancias registradas de su oficina en Irlanda. Las ganancias registradas de la oficina principal fantasma estaban libres de impuestos, porque de acuerdo con las leyes irlandesas, se le consideraba una "empresa sin nacionalidad".
Adivinen a dónde se fue la mayoría de las ganancias.
En 2011, Apple Sales International generó ganancias por 16,000 millones de euros, de los cuales menos de 50 millones se registraron a la oficina irlandesa. El resto quedó en la "oficina principal", fuera del alcance de cualquier autoridad fiscal.
Ese acuerdo también le convino al gobierno irlandés.
Irlanda fijó su tasa fiscal empresarial en 12.5%, una de las más bajas de Europa, para atraer a las grandes empresas al país.
Apple, Google, Facebook, eBay y Twitter tienen sus oficinas centrales de la Unión Europea en Irlanda.
Además, generaron empleos. Apple tiene 6,000 empleados en Irlanda; muchos de ellos fabrican iMacs en una fábrica en Cork, que alguna vez fue una ciudad irlandesa con muchas carencias. Apple señaló que es la mayor fuente privada de empleos en la ciudad.
Los Estados miembros de la Unión Europea pueden fijar su propia tasa fiscal. Sin embargo, las autoridades europeas señalan que los acuerdos que Irlanda celebró con Apple le dieron a la empresa una gran ventaja financiera sobre su competencia y que eso se considera asistencia gubernamental ilegal.
Apple no quiere pagar los impuestos, aunque los 14,600 millones de dólares más intereses que tendría que pagar representan apenas el 5% de los 231,000 millones de dólares en efectivo que declara en sus libros.