¿Twitter estará en la cumbre de tecnología de Trump?
Se espera que Donald Trump se reúna con muchos de los grandes nombres de la tecnología esta semana, incluyendo a los altos ejecutivos de Amazon, Facebook, Google y Apple.
Pero el ausente en la lista es el servicio del que Trump no puede prescindir: Twitter.
Jack Dorsey, CEO de Twitter, dijo a Re/code inicialmente que no había sido invitado a la cumbre de tecnología de Trump en Nueva York. Dorsey dijo después que no estaba seguro si había sido invitado.
Nu Wexler, vocero de Twitter, dijo que la compañía no tenía nada que compartir además de los comentarios de Dorsey.
El desaire potencial sobresale, considerando el papel que jugó Twitter en la campaña de Trump y en sus esfuerzos de transición hasta ahora. Si bien otros políticos comparten mensajes pensados cuidadosamente en la plataforma, Trump usa Twitter a todas horas para probar líneas de campaña, atacar reportes de medios, criticar negocios y retuitear publicaciones de apoyo de cuentas cuestionables.
"Francamente, es una forma de comunicación moderna”, dijo Trump en una entrevista la semana pasada cuando lo cuestionaron sobre si debería contenerse más en Twitter como presidente. "Entre Facebook y Twitter… tengo más de 40 millones de personas (siguiéndome)”.
Aun así, sólo uno de esos servicios atenderá a la reunión de la industria de la tecnología con Trump, al menos hasta ahora.
Seguramente, Twitter es un negocio mucho más pequeño, tanto en valor de mercado como en usuarios activos, que Facebook y otras empresas en la lista de invitados. Twitter también ha sido descrito como una “empresa manejada horriblemente” por Peter Thiel, el inversionista multimillonario que es parte del equipo de transición de Trump y ayudó a organizar la reunión. Mientras tanto, Thiel es el segundo miembro más longevo de la junta directiva de Facebook además de Mark Zuckerberg.
La reunión del miércoles podría dar una oportunidad a los líderes de tecnología de expresar sus preocupaciones y prioridades con la próxima administración después de que Trump contrastara con muchas de sus empresas.
Trump amenazó con boicotear a Apple, ir tras Amazon por violaciones anti monopolios y evidenció a Zuckerberg por su postura sobre inmigración. Silicon Valley le regresó el favor al llamar a Trump in “desastre para la innovación” y diseñar un juego de cartas para burlarse de él.
Pero Trump nunca atacó realmente a Twitter, ni viceversa.
Dorsey admitió en una conferencia de tecnología este mes que se siente “complicado” por el uso que hace Trump de la plataforma pero eligió sus palabras cuidadosamente.
"Creo que es un momento importante para la compañía y el servicio”, dijo Dorsey. “Tener al presidente electo en nuestro servicio usándolo como línea directa de comunicación permite que todos vean lo que tiene en mente al momento. Creo que eso es interesante”.
A diferencia de muchas empresas de tecnología, el valor de mercado de hecho aumentó tras la victoria de Trump, pues los inversionistas reconocieron su valor para el próximo presidente. Todo eso puede hacer más fácil para Dorsey asistir a la reunión de ser invitado, pero como los ejecutivos de otras empresas de tecnología, podría enfrentarse a un rechazo por la idea de juntarse con Trump.
Chris Sacca, uno de los primeros inversionistas de Twitter, tuiteó el domingo que “los líderes que vayan a Trump Tower serán burlados y perderán el respeto de sus empleados”.
Algunos empleados ya han tenido dificultades con el papel que fungió su servicio en ayudar a Trump.
Ben Matasar, un ex ingeniero de software de Twitter, preguntó: "A mis amigos de Twitter: ¿Qué construimos?”
