El puente que cambió a China para siempre hace medio siglo
Si bien China alberga al puente más largo y al más alto del mundo , ninguno de los dos es tan pionero como el puente sobre el río Yangtzé, en Nanjing.
El puente de dos pisos se construyó durante la turbulenta Revolución Cultural de China y se lo consideró vanguardista cuando lo inauguraron en 1968. Pero para algunas personas, lo más importante es que también fue el primer puente moderno diseñado y construido en China, sin ayuda de arquitectos extranjeros.
Lee: China abre el puente de vidrio más largo en un precipicio
En preparación al 50º aniversario de la revolución, se están llevando a cabo reparaciones de importancia en el puente, que sigue siendo motivo de orgullo en Nanjing, la antigua capital de China. El proyecto, encargo de las autoridades ferroviarias, tiene como objetivo asegurar el legado del puente a través de la documentación de su historia, de acuerdo con Lu Andong, director de la iniciativa y profesor de la Escuela de Arquitectura y Planificación Urbana de la Universidad de Nanjing.
"El puente era muy importante e indudablemente es un símbolo de la ciudad", explicó. "Lo están reparando por cuestiones de transporte y seguridad, pero me encantaría tener la oportunidad de transformar la torre y el parque adjunto al puente en sitios para recordar".
Hecho en China
En un principio, el gobierno chino esperaba construir el puente de Nanjing con su aliado comunista, la URSS. Como ya les habían ayudado a construir un cruce en Wuhan (unos 450 kilómetros río arriba), los soviéticos volvieron a ofrecer asistencia técnica. Sin embargo, poco después de que comenzara la construcción en 1960, las relaciones entre ambos países se tensaron.
Los expertos soviéticos se retiraron del proyecto en los días previos a la ruptura sino-soviética, la ruptura de las relaciones entre las potencias comunistas más grandes del mundo, en 1960. No obstante, el puente quedó terminado ocho años después. China consideró que el logro había sido una proeza de ingeniería… y una victoria propagandística.
Con más de 1.5 kilómetros de largo, el puente carga tanto automóviles como trenes. La plataforma superior es una autopista de cuatro carriles con banquetas, mientras que las vías del tren son parte de la ruta Beijing-Shanghái.
"A todos les encanta el puente", dijo Wang Shiqing, habitante de Nanjing que ha coleccionado más de mil piezas de recuerdos relacionados con el puente. "Es motivo de orgullo, particularmente para la gente de Nanjing", explicó.
Un nuevo comienzo
Como ocurre con otros puentes famosos (como el Golden Gate, en San Francisco, Estados Unidos), el puente sobre el río Yangtzé en Nanjing es un sitio popular entre los suicidas . Sin embargo, en el caso de los habitantes de Nanjing, es más conocido porque ha transformado la vida en la ciudad.
Antes de que el puente se construyera, la gente y las mercancías solo podían atravesar el río en transbordador. Los trenes que pasaban por la ciudad tenían que desarmarse y cargarse en barcazas para poder seguir su viaje.
Cuando quedó terminado, el puente cambió la vida de los habitantes de la ciudad. "En cuanto a función, facilitó mucho la vida de la gente", dijo Wang, quien nació el mismo año en el que se inauguró el puente. "Redujo el tiempo de cruce del río y se volvió la arteria principal para el transporte de norte a sur".
De acuerdo con Lu, el puente combinó expresiones visuales de tecnología y progreso.
"No es solo infraestructura, sino una obra arquitectónica", dijo. "La forma del puente hablaba de velocidad, de penetración y de flujo de fuerza… algo parecido a lo que se ve en el futurismo italiano. La forma del puente tiene la intención de expresar un flujo interno de fuerzas, como si la estructura fuera una simple tubería de energía".
Sin embargo, la composición espacial de las torres del puente se basa en el lenguaje arquitectónico tradicional: un acceso central, una ruta peatonal y un podio.
"Este diseño se volvió un caso clásico de arquitectura moderna china y fue extremadamente importante. Esta fórmula tuvo impacto duradero".
Un 'icono pop de la modernidad'
Además de esculturas de campesinos, obreros y soldados, en el puente también se exhiben citas de Mao Zedong y una estatua del antiguo líder de 70 metros de alto.
"Las banderas rojas y las decoraciones en forma de magnolias son muy chinas", explicó Wang, refiriéndose a las tres esculturas en forma de banderas que se encuentran en la punta de las torres del puente.
Este diseño particular refleja a "las tres banderolas rojas", una importante campaña de propaganda que se llevó a cabo durante la Revolución Cultural. Las banderolas representaban ideologías que llamaban a la construcción de un Estado comunista en China.
Lee: Xi Jinping, el presidente chino que vivió en una cueva
El puente figuraba constantemente en carteles propagandísticos, que solían insinuar que la estructura representaba una "gran victoria del pensamiento de Mao Zedong" (una teoría política que fuera de China se conoce como maoísmo). En uno de esos carteles se leía una cita de Mao: "El pueblo chino tiene empuje y fuerza… tenemos que alcanzar y superar los niveles de avance de todo el mundo".
El puente se erigió en un momento turbulento de la historia de China y tuvo un amplio impacto cultural, de acuerdo con Lu. "Este puente es uno de los logros más reconocidos de la época de la Revolución Cultural", dijo. "Es tanto un monumento político como un símbolo de éxito tecnológico e histórico. Su imagen figuraba en tazas, lápices, zapatos, espejos, cigarrillos y bicicletas en todo el país… el puente se volvió un icono pop de la modernidad".
El legado del puente también persiste en la gente que lleva su nombre. De acuerdo con Wang, muchas personas de Nanjing le pusieron Chang Jiang a su primogénito (que en chino significa Yangtsé) y a su segundo hijo le pusieron Da Qiao (que significa gran puente).
El renacimiento de las glorias del ayer
La Comisión Nacional de Desarrollo y Renovación, el órgano de planificación estatal de China, aprobó en abril de 2016 un programa de 27 meses de reparaciones al puente. Según un informe gubernamental, los factores clave de la decisión fueron los "riesgos de seguridad y durabilidad".
Sin embargo, la apariencia de la estructura también cambiará. Se llevará a cabo una inversión de 1,090 millones de yuanes (alrededor de 2,9000 millones de pesos) para restaurar algunas de las estatuas más importantes, incluidas las que se encuentran en las márgenes cercanas del río. Se reforzarán las esculturas del puente y también se remodelarán los pasamanos y los muelles.
Lee: La restauración de la Gran Muralla china se lleva la historia del pueblo
Como las generaciones más jóvenes están menos conscientes del significado histórico del puente, Lu espera que las renovaciones restauren no solo al puente, sino al interés de la ciudad en él.
"La generación mayor evidentemente se enorgullece más del puente", dijo. "Es muy importante volver a tener acceso a la memoria del puente de forma creativa, permitir que la gente de todas las edades viva y entienda los recuerdos que evoca".
Visita la galería fotográfica para ver ilustraciones propagandísticas en las que figura el puente, parte de la colección del Instituto Internacional de Historia Social de Ámsterdam.