Los platillos a base de carne de res y de cerdo enriquecen las mesas de millones de personas en todo el mundo. Su alto contenido nutricional y su versatilidad para guisarse, las convierten en ingredientes protagónicos, lo mismo de cenas de alta cocina que de almuerzos caseros.
Esta preferencia del consumidor es la vista exterior de una profunda industria, cadena productiva con decenas de eslabones que incluyen a ganaderos y productores, empacadores, procesadores, proveedores, compañías exportadoras, restaurantes, hoteles y supermercados. Grandes y pequeños negocios se benefician de esta actividad, no solamente de manera directa, sino también por todos los servicios que detonan, como transportación y logística, cadena de frío y servicios de comunicaciones.