Los malos sueldos desmotivan a los jóvenes para estudiar una carrera en AL

Los estudios superiores en América Latina están experimentando un freno progresivo en la tasa de matriculación, algo que se explica por, entre otros factores, condiciones laborales desfavorables en términos de salario e impuestos, expuso este viernes el economista y profesor Claudio Rama.

Atribuyó la desaceleración de la cobertura académica a la tasa de retornos, es decir, el salario que se percibe una vez se termina la universidad es insuficiente para compensar el costo que se pagó por ello.

Latinoamérica en su totalidad experimenta una caída en el crecimiento de la matrícula en los últimos años, puesto que del 2000 al 2012 el incremento era del 6% y de 2011 a 2016 el porcentaje disminuyó hasta situarse en 3%, dijo durante la VII Asamblea General Extraordinaria de la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (Udual), celebrada en la Ciudad de México.

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"Estamos en un proceso de cierto bloqueo a diferencia de otros continentes en los cuales el crecimiento ha subido", aseguró el economista uruguayo.

El argumento es sencillo, "si los salarios no suben, la gente va a dejar de querer estudiar".

Por si esto fuera poco, una capa extra se vierte sobre la problemática: aunque las universidades sean públicas, la frustración del alumnado una vez se gradúa es mayúscula, puesto que existe "un aumento de tasas de tributación de los profesionales".

"La educación gratuita es mentira, es una educación gratuita de pago diferido y se paga en los impuestos a la renta de la sociedad, esto es lo que hace compleja la diferencia de los retornos", aseveró Rama.

Por ello, llamó a "buscar mecanismos de financiación que sean contra las estructuras tributarias" y que permitan a un mayor número de personas acceder a una educación superior.

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Otra herramienta que propuso el economista es potenciar la educación virtual a distancia.

En América Latina se estima que para 2030 el 30% de las matrículas serán en estudios a distancia. La cifra ya está casi alcanzada en la actualidad por Estados Unidos, con 29% de matriculaciones en educación virtual, algo que evidencia el rezago en América Latina.

En cuanto a la perspectiva del sector público, consideró que "no es posible proyectar un crecimiento de los recursos de la sociedad latinoamericana a futuro" en materia de educación.

"El ciclo expansivo terminó definitivamente y nos colocó en un punto muy lejano en términos de la educación y valor de conocimiento", lamentó.

Esto presenta otros efectos colaterales como es haber perdido la oportunidad de "inserción en el nuevo escenario tecnológico de crecimiento".

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El uruguayo concluyó afirmando que la región no podrá entrar en el nuevo modelo de valor en el que prima el conocimiento si persiste esta desaceleración en la cobertura universitaria.