Por qué el agua embotellada tiene fecha de caducidad
El agua no tiene una fecha de vencimiento natural, pero muchas industrias comenzaron a colocar fechas en las botellas como parte de sus estándares internos de control de calidad. En algunos países, esta práctica se originó a partir de leyes que exigían que todos los productos alimenticios tuvieran una fecha de caducidad.
De acuerdo con Healthline, un sitio especializado en salud y nutrición, esta medida se extendió como una norma voluntaria para informar al consumidor y garantizar la seguridad del producto. Aunque en muchos lugares no es obligatorio, las empresas continúan imprimiendo fechas por prevención.
Healthline indica que "aunque no se requiere, el agua embotellada suele imprimirse con una fecha de caducidad" debido a que, con el tiempo, el plástico puede transferir químicos al líquido.
Qué riesgos hay si se bebe agua pasada de la fecha
Según Healthline, el principal riesgo está en los componentes del envase. El plástico puede liberar compuestos como antimonio y bisfenol A (BPA), que pueden contaminar el agua si se almacena por periodos prolongados.
La exposición continua a estos químicos puede tener efectos en la salud digestiva, el sistema inmune y la función respiratoria. Aunque el agua siga teniendo apariencia normal, la contaminación puede no ser evidente al gusto o al olfato.
Además, si se trata de agua carbonatada, Healthline advierte que puede perder gas con el tiempo y cambiar de sabor, lo que también podría generar molestias al consumirla.
Consejos para almacenar agua embotellada de forma segura
La manera en que se almacena el agua influye directamente en su seguridad. Healthline recomienda mantener las botellas en un lugar fresco, seco y sin luz solar directa, para evitar el deterioro del plástico.
"Las altas temperaturas pueden favorecer el crecimiento de bacterias y aumentar la liberación de compuestos dañinos desde el envase", advierte Healthline.
También es importante evitar que el agua esté cerca de productos de limpieza u otras sustancias químicas, ya que el plástico es ligeramente permeable y puede absorber olores o partículas externas.
Qué pasa con el agua de la llave almacenada en casa
El agua de grifo también puede almacenarse durante un tiempo limitado. Healthline señala que, si se almacena correctamente en recipientes sanitizados y grado alimenticio, puede conservarse hasta por seis meses.
Aunque no representa un riesgo directo, esta agua puede desarrollar un sabor desagradable con el tiempo. Esto se debe a la mezcla del dióxido de carbono del aire con el agua, que altera ligeramente su acidez.
Para prepararla adecuadamente, debe etiquetarse con la fecha de llenado y mantenerse en condiciones similares a las del agua embotellada.