Sabotaje terrorista es la fuerza oculta tras el alza de los precios del petróleo
Los precios del petróleo se han disparado por la esperanza de un congelamiento de la producción mundial. Sin embargo, un factor oculto también está impulsando el pico en los precios: los ataques terroristas contra instalaciones petroleras.
El sabotaje a los ductos petroleros clave ha conducido a cortes de suministro globales a niveles “elevados”, estimados en más de 3 millones de barriles por día, según el Royal Bank of Canada (RBC).
Por ejemplo, el mes pasado un importante oleoducto en Nigeria fue bombardeado, con lo cual se interrumpió la producción de 250,000 barriles de crudo hasta mayo.
Los grupos extremistas representan un “peligro claro y presente” para las instalaciones de energía, especialmente para aquellas en la región rica en petróleo de África del Norte, escribió RBC en un reciente reporte de investigación.
Los precios del petróleo han subido recientemente a alrededor de 40 dólares al día actualmente desde 26 dólares por barril a mediados de febrero. Esta alza pronunciada ha sido atribuida en gran parte a un esfuerzo por “congelar” la producción de petróleo por parte de Arabia Saudita, Rusia y otros productores. Los inversores también están apostando a que la producción estadounidense se reducirá drásticamente en 2016.
Pero el nerviosismo geopolítico y los cortes al suministro también están desempeñando un papel importante. Eso es un cambio respecto a gran parte de los últimos dos años, cuando estas preocupaciones quedaban ensombrecidas por el épico exceso de oferta y por los esfuerzos de Irán por aumentar la producción.
“Los cortes de la OPEP en nichos como los recientemente vistos en Irak y Nigeria son un buen recordatorio de lo rápido que los volúmenes pueden ser marginados”, escribió RBC. “A medida que el mercado se estrecha gradualmente, pensamos que estos puntos de conflicto volverán al centro del escenario”.
A principios de este mes, la Agencia Internacional de Energía (AIE) señaló que los precios del petróleo se han “ recuperado notablemente ”, en parte debido a cortes de suministro en los países de la OPEP Irak y Nigeria. Los cortes en Irak y Nigeria por sí solos han interrumpido la producción de cerca de 850,000 barriles de exportaciones, estima la AIE.
Por supuesto, ISIS se beneficia de los recortes al suministro que elevan los precios del petróleo debido a que el grupo terrorista gana dinero vendiendo petróleo. Sin embargo, los ataques militares dirigidos por Estados Unidos en contra instalaciones petroleras de ISIS también han afectado la producción petrolera del grupo en los últimos meses.
Estas son algunas de las principales regiones productoras de petróleo que enfrentan retos de seguridad:
Nigeria: El mes pasado, una explosión en un oleoducto submarino operado por Royal Dutch Shell en Nigeria causó una interrupción importante que podría durar hasta mayo. La AIE estima que se ha interrumpido la producción de unos 250,000 barriles de petróleo por día.
No está claro qué causó la explosión y Shell no respondió a una solicitud de comentarios.
Las autoridades sospechan un sofisticado ataque por parte de militantes que desplegaron buzos, informó el Financial Times.
“Las personas que hicieron esto sabían lo que estaban haciendo y deseaban el máximo daño”, dijo una fuente al FT.
Irak: La región semiautónoma del Kurdistán en Irak sufrió un gran golpe el mes pasado después de que preocupaciones de seguridad provocaron el cierre de un oleoducto clave que transporta 600,000 barriles de petróleo por día. El oleoducto ha sido “saboteado con regularidad” en el lado turco de la frontera desde el verano pasado, dijo RBC. Los ingresos kurdos por exportaciones se desplomaron a 233 millones de dólares en febrero desde 650 millones de dólares en enero, según la AIE.
Y la producción petrolera ha disminuido en general en hasta 320,000 barriles por día en febrero en Irak, a medida que el país lucha por combatir los ataques de ISIS.
Aunque la producción de petróleo iraquí se mantiene cerca de máximos históricos, los analistas advierten que sus instalaciones están en riesgo de sufrir nuevos ataques por parte de terroristas.
Argelia: Un yacimiento de gas natural y una planta de procesamiento en Krechba, Argelia, sufrieron un ataque con cohetes el 18 de marzo. RBC dijo que el ataque fue ejecutado por una filial local de Al Qaeda. Aunque las operaciones no se vieron afectadas, el ataque obligó a BP y a la noruega Statoil a evacuar a los empleados.
Argelia, el mayor productor de gas en África y el tercer mayor productor de petróleo del continente, también fue blanco de un ataque de Al Qaeda en 2013 que mató a decenas de trabajadores extranjeros.
Libia: En febrero, Libia bombeó solo 360,000 barriles por día, según la AIE. Eso es un mínimo de un año y solamente una “pequeña fracción” de los 1.6 millones de barriles que producía al día antes de que Muamar Gadafi fuera derrocado en 2011.
Militantes vinculados a ISIS intensificaron los ataques contra el sector petrolero de Libia a inicios del año, atacando puertos vitales en Es Sider y Ras Lanuf, dijo la AIE. Solo dos de las siete terminales de carga en tierra del país están en funcionamiento.
Alanna Petroff e Ivana Kottasova de CNNMoney contribuyeron a este informe.