El déficit en cuenta corriente, en mayor nivel desde tercer trimestre de 2015
La cuenta corriente de México, que se refiere a las exportaciones e importaciones del país, registró un mayor déficit en el segundo trimestre del año, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).
El saldo negativo se amplió a 7,852 millones de dólares, mayor al déficit de 7,597 millones de dólares registrado en el primer trimestre del año.
La cuenta corriente se refiere a las exportaciones e importaciones de bienes y servicios y es uno de los componentes de la balanza de pagos (BP), es decir, del registro de las transaciones que hace el país con el exterior. Los otros componentes son: la cuenta de capital (inversión fija y de cartera), cambio en las reservas internacionales y una cuenta de cuadre llamada errores y omisiones.
Si la cuenta corriente es deficitaria tendrá que financiarse con un superávit en la cuenta de capital, preferentemente con inversión fija, de acuerdo con una columna de la directora de análisis económico-financiero de Banco Base, Gabriela Siller.
El déficit del segundo trimestre es el mayor que se ha registrado desde el tercer trimestre de 2015, cuando se ubicó en 7,949 millones de dólares, aunque está por debajo del saldo negativo de 8,453 millones de dólares reportado en el segundo trimestre de 2015.
El saldo negativo se atribuye a una aceleración de los flujos de salida en los valores del Gobierno, de acuerdo con la agencia Reuters. Aunque según los datos de Banxico, se registró un saldo mayor en las importaciones de 99,985 mdd, mientras que las exportaciones reportaron un saldo menor de 97,976 mdd, es decir, fueron menores los envíos de México que lo que importó de otros países.
En tanto, en los primeros seis meses del año, el saldo negativo de la cuenta corriente registra un acumulado de 15,449 millones de dólares, equivalentes al 3.0% del Producto Interno Bruto (PIB) y se estima que termine el año con un déficit equivalente al 3.1% del PIB, según Banxico.
Banxico ha puesto al déficit en cuenta corriente como un factor de riesgo para la economía mexicana, sobre todo al existir condiciones que generan aversión al riesgo como las elecciones de Estados Unidos, el brexit y la desaceleración en China, entre muchos otros que pueden provocar miedo y por lo tanto salidas masivas de capitales.
Dentro de la inversión de cartera destacó la salida de 7,032 millones de dólares del mercado de deuda gubernamental, un monto mayor a los 4,336 millones de dólares que salieron de México en el primer trimestre.
La fuga de capitales acumulada durante los primeros seis meses del año fue de 11,368 millones de dólares.
"En el periodo reportado se registró una menor demanda por parte de extranjeros de activos en pesos, particularmente de Cetes, lo que en parte podría explicar la depreciación de la moneda nacional que se observó durante el trimestre", precisó Banxico en un comunicado.
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Por su parte, la balanza de bienes y servicios mostró un déficit de 4,872 millones de dólares, levemente menor a los 5,022 millones de dólares del primer trimestre, en medio de un entorno internacional adverso que continuó mermando la demanda global, dijo el comunicado.
