La reforma fiscal de EU podría empeorar el déficit comercial
La reforma fiscal del Partido Republicano ciertamente recortará los impuestos e incluso podría crear algunos empleos.
Pero muchos expertos creen que aumentará el déficit comercial.
“El presidente quizás quede desagradablemente sorprendido de que su política fiscal y su política tributaria estén trabajando en contra de su objetivo de reducir el déficit comercial”, dice Brad Setser, un alto investigador del senior del Council on Foreign Relations.
Estados Unidos tuvo un déficit comercial de aproximadamente 500,000 millones de dólares el año pasado y en 2017 está en camino de superar eso. El presidente estadounidense Donald Trump argumenta que el déficit muestra que Estados Unidos está perdiendo empleos y dinero ante México, China y otras naciones. Los economistas discrepan.
“No se puede decir: 'altos déficits comerciales, nos están matando'”, dice Phil Levy, alto investigador del Chicago Council on Global Affairs, que fungió en el Consejo de Asesores Económicos del presidente George W. Bush. “Con frecuencia vemos mayores déficits comerciales cuando tenemos un desempleo más bajo”.
Lee: México analizará cambios a su marco fiscal por reforma en EU
Es cierto: el déficit comercial de Estados Unidos ha aumentado en los últimos cuatro años, mientras que el desempleo ha disminuido constantemente hasta casi 4%. Durante la Gran Recesión, el desempleo se disparó al 10% y el déficit comercial disminuyó drásticamente.
Los expertos aún no están seguros acerca de cuál será el impacto de esta reforma tributaria. En realidad, podría aumentar o disminuir el déficit, dependiendo de si se mira a través de un lente de contabilidad o de gasto.
El argumento de que aumentará el déficit comercial
Los recortes de impuestos dan a los estadounidenses más efectivo en su bolsillo, lo que significa que las personas podrían aumentar sus gastos y crear más demanda.
Es probable que las compañías estadounidenses que fabrican productos en Estados Unidos no estén preparadas para satisfacer ese aumento en la demanda de inmediato. Eso podría obligar a los consumidores a comprar más automóviles importados, computadoras y otros bienes. Si las importaciones aumentan más rápido que las exportaciones, el déficit comercial crece.
Entonces, en la economía “real”, los recortes de impuestos podrían aumentar el gasto, lo que probablemente aumentaría el déficit comercial.
Lee: Más IVA y menos ISR para enfrentar la reforma fiscal de EU
El argumento de que disminuirá el déficit comercial
Pero hay una forma en que la reforma fiscal podría reducir el déficit y ocultar algunas realidades de la economía, todo gracias a la contabilidad.
Estados Unidos ha tenido la tasa fiscal corporativa más alta en el mundo en desarrollo, con 35%. Las compañías estadounidenses han mantenido miles de millones de dólares de ganancias en el extranjero para evadir la alta tasa impositiva al prestar su propiedad intelectual a sus negocios subsidiarios.
Por ejemplo, puede que un iPhone sea diseñado por una empresa estadounidense, pero en el mundo de los impuestos no siempre cuenta como una exportación estadounidense debido a las lagunas fiscales a través de negocios subsidiarios.
La revisión fiscal del Partido Republicano recorta la tasa corporativa del 35% al 21%, y eso podría alentar a las empresas a llevar de vuelta sus ganancias a Estados Unidos. En teoría, si todas esas ganancias fueran devueltas, esos iPhones contarían como exportaciones estadounidenses.
Más exportaciones de bienes estadounidenses, como teléfonos celulares, ayudarían a disminuir el déficit comercial de Estados Unidos.
Los expertos señalan que esta disminución del déficit comercial se debe a un cambio contable y no a un cambio importante en la forma en que realmente funciona la economía de Estados Unidos.
Sube. Baja ¿Realmente importa el déficit comercial?
Los economistas dicen que usar un déficit para valorar una relación comercial, un acuerdo comercial o justificar la imposición de aranceles es una mala idea.
“Es una visión global de nosotros contra ustedes... el verdadero problema no es: '¿cómo mantenemos las importaciones fuera?'. El verdadero problema es: '¿cómo podemos aumentar las exportaciones?'”, dice David Kelly, director de estrategia global de JPMorgan Funds. “Los aranceles siempre han terminado mal”.
Aunque la balanza comercial con China o México puede no ser tan significativa, la balanza comercial general juega un papel importante cuando los funcionarios estadounidenses calculan las cifras de crecimiento económico. En un sentido matemático, un déficit comercial pesa sobre el crecimiento.
Sin embargo, el gasto del consumidor representa más del 60% de la actividad económica de Estados Unidos. Entonces, si los compradores estadounidenses están adquiriendo más importaciones, eso probablemente impulsará el crecimiento económico y compensará el impacto negativo de un déficit.
Lee: Las 3 posibles respuestas de México a la reforma fiscal de EU