Exxon, la mayor petrolera de EU, se está perdiendo el auge del crudo
CIUDAD DE MÉXICO - La mayor petrolera estadounidense reveló el viernes que bombeó 7% menos de petróleo y gas a nivel mundial el trimestre pasado. Es un reflejo de cómo Exxon tardó en capitalizar la revolución de esquisto en su propio patio trasero.
Las ganancias de Exxon subieron 18% a 3,950 millones de dólares (mdd). Sin embargo, esa cifra incumplió con las expectativas y está muy lejos de las ganancias que muchos de sus pares más pequeños y más ágiles están disfrutando gracias a los crecientes precios del petróleo y la agresiva producción.
Las acciones de Exxon cayeron 4%, continuando sus dificultades recientes.
“La producción de Exxon fue muy, muy débil. Ha estado disminuyendo prácticamente sin cesar. Un descenso del 7% es realmente bastante extremo”, dijo Pavel Molchanov, un analista de energía de Raymond James.
Chevron, el mayor rival de Exxon, reveló el viernes que sus ganancias se duplicaron con creces a 3,400 mdd gracias a los mayores precios del petróleo y a un aumento del 2% en la producción.
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“Tienes a Exxon encogiéndose y a Chevron creciendo. Esa es una brecha enorme”, dijo Molchanov. Los últimos resultados de Exxon podrían no ser suficientes para restaurar la confianza de los inversores en una empresa que se encuentra en una profunda depresión.
Su producción ha disminuido en ocho de los últimos nueve trimestres pasados, incluso a medida que Estados Unidos bombea más petróleo que nunca.
“Este trimestre fue un punto bajo”, dijo Neil Chapman, vicepresidente senior de Exxon, durante una conferencia telefónica.
Las caídas más abruptas se produjeron en Europa, donde el negocio de gas natural de Exxon ha estado tambaléandose. La producción allí de hundió 30%.
Exxon dijo que también está recortando intencionalmente la producción de gas natural en EU para “girar” hacia el petróleo. Esa decisión refleja los precios deprimidos del gas natural y subraya el daño causado por la compra de Exxon del productor de gas natural XTO Energy, en 2010.
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Otro problema para Exxon: las operaciones de mantenimiento programadas y no programadas, que incluyen algunos incidentes en sus refinerías. “No estamos contentos con eso. Estamos resolviéndolo”, dijo Chapman.
La buena noticia para Exxon es que ahora está invirtiendo mucho en esquisto, y está empezando a ver algunos resultados. Exxon dijo que su producción en la Cuenca del Pérmico del oeste de Texas y en Bakken de Dakota del Norte se disparó un 30% el trimestre pasado.
Y está abriendo rápidamente plataformas petrolíferas en el Pérmico, el yacimiento petrolífero más grande y de más rápido crecimiento de Estados Unidos.
El presidente ejecutivo, Darren Woods, también está tratando de impulsar el crecimiento al inyectar miles de millones de dólares en costosos proyectos en América del Sur, África y Papúa, Nueva Guinea.
El progreso en esos proyectos en el extranjero, así como en el Pérmico, “nos está posicionando bien” para cumplir con los objetivos de crecimiento a largo plazo, dijo Woods en un comunicado.
Pero los inversores están perdiendo la paciencia con Exxon, a medida que sus rivales se enfocan en devolver efectivo a los accionistas a través de recompras masivas. Exxon desechó su plan de recompra a principios de 2016, cuando los precios del petróleo se desplomaron.
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A pesar de que las crecientes ganancias de Chevron no cumplieron con las expectativas, la segunda mayor petrolera estadounidense reveló sus planes de lanzar un programa de recompra de acciones. Chevron dijo que anticipa recomprar 3,000 millones de acciones por año.