Los problemas de Pemex no se resolverán en un año, advierte Hacienda
CIUDAD DE MÉXICO (Expansión) - Así como Roma no se hizo en un día, los problemas estructurales de Pemex no se resolverán en un año, consideró este lunes la Secretaría de Hacienda, en medio de las presiones generadas tras las opiniones de las calificadoras de riesgo internacionales.
"No se puede corregir en un año un problema que se ha venido acumulando durante varios años", dijo en la víspera el titular de la Unidad de Planeación Económica de Hacienda, Alejandro Gaytán, en conferencia de prensa sobre las finanzas públicas del país.
El reconocimiento de que la situación problemática de Pemex tardará más de un año en arreglarse ocurre días después de que Fitch realizara el más severo recorte de la calificación crediticia en 19 años y la dejara a un paso de perder el grado de inversión con un panorama negativo. Mientras Moody's, otra de las principales firmas calificadoras, otorgó el beneficio de la duda sobre los planes para la petrolera, pero solo por un plazo de seis meses, tras el cual la nota de la compañía podría ser revisada.
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El funcionario describió que el problema estructural de Pemex está relacionado con una incapacidad de la empresa para generar inversiones que apoyen la producción de petróleo que ha pasado de 3.4 millones de barriles diarios (mdbd) a unos 1.8 mdbd.
"Es una de las prioridades del gobierno federal, actuar, cuales son las causas que han generado esta caída", recalcó.
Gaytán dijo que analizan una estrategia junto con el Consejo de Administración de Pemex para identificar las necesidades de la compañía y con ello elegir la mejor estrategia para atender sus problemas.
"Sí estamos revisando cuál es la mejor estrategia para solucionar el problema de Pemex", dijo sin dar más detalles.
Explicó que se implementarán medidas para apoyar a Pemex que al final de sexenio significará un costo fiscal de 66,000 mdp.
Hacienda ve riesgos para la economía por Pemex
La Secretaría de Hacienda reconoce dos riesgos para el crecimiento económico de este año: la volatilidad en los precios del petróleo y un posible enfriamiento en la economía global que afecte a Estados Unidos, dijo Gaytán.
"Por supuesto, frente a los signos de desaceleración de la economía, pues hay ciertos riesgos", indicó.
Uno de ellos es por la vía de los ingresos petroleros por la alta volatilidad en los precios internacionales del petróleo de los meses pasados que pudiera llevarlos a niveles bajos, con una consecuente merma en lo que entra al erario por la vía de la venta de crudo y que soporta alrededor del 20% de los ingresos públicos.
Aunque recordó que se cuenta con las coberturas petroleras en caso de una caída en los precios de esa materia prima, para el cual el gobierno federal estima que la mezcla mexicana promediará 55 dólares por barril.
"Si bien la volatilidad pudiera tener un efecto, también se cuenta con las coberturas petroleras para hacer frente", dijo.
Sobre las advertencias de organismos internacionales y especialistas ante un posible enfriamiento de la economía mundial y en Estados Unidos con efectos en México, dijo que estarán vigilando constantemente la situación para evitar presiones y lograr el cumplimiento de las metas de déficit y el calendario de gasto.
