Los mexicanos con menores salarios aumentaron en el sexenio de Peña
Desde el primer año que gobernó Enrique Peña Nieto hasta el último trimestre de 2018, cinco millones de mexicanos se sumaron a la población que gana hasta dos salarios mínimos. En contraste, la población que gana más de tres salarios mínimos disminuyó dos millones de personas.
Al terminar 2018, los trabajadores de más bajos ingresos representaban 43.7% de la población ocupada, de representar 37.4% en 2013, de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo de Inegi. En tanto, población que gana más de cinco salarios mínimos pasó de 7.5% a 4.5% de la población ocupada.
No obstante, el sexenio de Peña Nieto se caracterizó porque el nivel de desocupación disminuyó drásticamente, desde 5.2%, el punto más alto que alcanzó en el tercer trimestre de 2013, hasta 3.26% al terminar 2018.
Lo que refleja ese fenómeno es que México fue menos productivo, explicó Manuel Molano, director adjunto del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO). El salario es un reflejo de la productividad total de los factores de la economía, recordó. “Hay una serie de elementos no imputables al trabajador. En México hay que trabajar más por una serie de factores ajenos a él”.
El que crezca el empleo en los rangos salariales más bajos también es indicativo de que la mayor población en México tiene niveles educativos bajos y por ende trabaja en empleos de bajo valor agregado, refiere Molano. "Mucho tiene que ver con cuánto y en qué sé invirtió durante el sexenio, que sean recursos que mejoren la productividad de las familias y de las empresas", dijo.
La precariedad laboral también se traduce en un aumento en la Tasa de Condiciones Críticas de Ocupación, la cual pasó de 11.8% de enero de 2013 a 15.3% de diciembre de 2018. Esta es la población ocupada que trabaja menos de 35 horas a la semana por razones ajenas a sus decisiones, que debe trabajar más de 35 horas semanales con ingresos mensuales inferiores al salario mínimo y a las que laboran más de 48 horas semanales ganando hasta dos salarios mínimos.
De 2013 a 2018, la tasa de desocupación ha disminuido para 28 de las 32 entidades del país, mientras que Tabasco, Chiapas, Campeche y Veracruz no han podido seguir la inercia que vive el país y han incrementado su tasa de desempleo.
"Los estados petroleros son los que no se han recuperado. Hay que recordar que hubo caída en el precio del petróleo que hizo perder un dinamismo de empleo formal”, comentó Kristóbal Mélendez, analista del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria.
Las tasas de desocupación más bajas las tiene Guerrero con 1.2%, Yucatán con 1.5%, Oaxaca con 2%, Hidalgo, Morelos y San Luis Potosí con 2.1%, y Baja California y Chihuahua con 2.2%