EU y la Unión Europea, un acuerdo casi condenado al fracaso
LONDRES (CNN) - Europa está lista para reanudar las conversaciones con Estados Unidos sobre un acuerdo comercial transatlántico. Pero podrían estar condenadas de antemano.
Los Estados miembros de la Unión Europea (UE) votaron el lunes para iniciar conversaciones comerciales con Estados Unidos a pesar de la oposición de Francia, que está en contra de la postura de Estados Unidos sobre el cambio climático, y que podría frustrar un acuerdo final.
Cecilia Malmström, la principal funcionaria de comercio de Europa, dijo que contactará al gobierno de Trump “tan pronto como se despierten” para informarles del resultado.
“Estamos listos [para comenzar las conversaciones] cuando ellos lo estén”, agregó.
Sin embargo, un desacuerdo sobre la agricultura podría descarrilar las conversaciones antes de que comiencen siquiera. La Unión Europea dice que la agricultura no será objeto de debate, mientras que Estados Unidos insiste en que debe ser parte de las negociaciones.
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Las divisiones subrayan la dificultad de la tarea que enfrentan los negociadores y la complicada historia de las conversaciones comerciales entre Estados Unidos y Europa. El último impulso dirigido a lograr un importante acuerdo comercial —conocido como Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión (TTIP, por sus siglas en inglés)— terminó en un punto muerto en 2016.
“Creo que el lado de la UE sería reacio a negarse a hablar, pero los obstáculos para un acuerdo exitoso son incluso mayores que con el [presidente Barack] Obama”, dijo Peter Holmes, experto en comercio y profesor de Economía en la Universidad de Sussex.
La oposición en París
Hay mucho en juego. El comercio de bienes y servicios entre la UE y Estados Unidos tiene un valor de más de 1.1 billones de dólares al año. Pero el presidente francés, Emmanuel Macron, ya ha establecido su posición sobre las conversaciones: Europa no debe negociar un acuerdo comercial con un país que no es parte del Acuerdo de París de 2015 sobre el clima.
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció en 2017 que Estados Unidos se retiraría del acuerdo. Macron sostiene que no sería justo que un solo lado de un acuerdo comercial siga los estrictos estándares ambientales acordados en París. Francia votó en contra de abrir negociaciones comerciales el lunes, pero fue rechazado por la mayoría de los Estados miembros de la UE.
Aunque Francia no pudo evitar el inicio de las conversaciones comerciales con Estados Unidos, sí puede bloquear cualquier acuerdo que resulte. Todos los Estados miembros de la UE deben firmar acuerdos comerciales negociados por el bloque.
“Esta lucha tendrá que continuar, particularmente en el Parlamento Europeo, sin el cual ningún acuerdo comercial puede ser aprobado después de las negociaciones”, dijo el portavoz de Macron.
El problema de la agricultura
Estados Unidos y la Unión Europea ya están en desacuerdo sobre si la agricultura debería ser incluida en las discusiones comerciales.
La Unión Europea es muy protectora de su sector agrícola fuertemente subsidiado. Mientras tanto, Estados Unidos quiere derribar los aranceles y vender productos agrícolas en Europa.
Es un tema muy emocional en muchas partes de Europa, donde los votantes temen que un acuerdo comercial con Estados Unidos abra sus puertas a cultivos modificados genéticamente o a pollo lavado con cloro.
Estados Unidos insiste en que, si Europa quiere un acuerdo, tiene que incluir la agricultura.
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“Estamos trabajando en otras áreas, dándonos cuenta de que no habrá ningún [acuerdo de libre comercio] sin agricultura”, dijo el mes pasado el representante de comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer.
Mientras tanto, los funcionarios de la UE argumentan que la agricultura nunca ha estado sobre la mesa de negociaciones.
Cuando el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, visitó la Casa Blanca el año pasado, señalaron, él y Trump solo acordaron trabajar para eliminar los aranceles y las barreras a los “productos industriales no automotrices”.
La declaración conjunta emitida por los dos líderes en aquel entonces no hacía mención de la agricultura. El lunes, Malmström nuevamente citó el documento al decir que la agricultura no sería discutida.
Tensiones crecientes
Los desacuerdos siguen a una serie de confrontaciones entre Estados Unidos y Europa sobre el comercio.
A principios de esta semana, el gobierno de Trump amenazó con imponer aranceles a productos europeos por un valor de 11,000 millones de dólares por subsidios aeronáuticos. La Comisión Europea dijo que buscaría tomar represalias.
Trump también está considerando la posibilidad de imponer aranceles de hasta el 25% sobre las importaciones de vehículos europeos; la decisión debe ser anunciada a más tardar a mediados de mayo.
Ya impuso aranceles a las exportaciones europeas de acero y aluminio. Europa tomó represalias con aranceles sobre productos estadounidenses por valor de más de 3,000 millones de dólares, como motocicletas, jugo de naranja, whisky estadounidense, cigarrillos y mezclilla.