Las remesas a México están en récord y el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) lo sabe muy bien, por lo que los mexicanos que viven en el extranjero podrán enviar remesas a través del Banco del Bienestar con el fin de lograr un mejor tipo de cambio.
En conferencia de prensa este lunes, el gobernador del Banco de México (Banxico), Alejandro Díaz de León, dijo que es posible mejorar el flujo de remesas mediante la bancarización.
Actualmente el Banco del Bienestar tiene 433 sucursales, informó Diana Álvarez, titular de la dependencia. Sin embargo, con la suma de los corresponsales, la capacidad aumenta a 1,942 puntos de contacto.
Las cuentas en el Banco del Bienestar se podrán abrir de manera remota desde Estados Unidos, con la matrícula consular o el pasaporte expedidos por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Los migrantes que estén en Estados Unidos podrán tener una "Debicuenta exprés", la cual les dará una tarjeta física que sea aceptada en México y Estados Unidos.
Aún está por definirse el lugar en donde los migrantes recibirán las tarjetas físicas.
En 2020, México recibió 11.4% más remesas que en 2019 con 40,607 millones de dólares (mdd). El monto equivale a 3.8% del PIB, según estimaciones del subgobernador de Banxico, Joanthan Heath.
En diciembre pasado, una propuesta que fue avalada por el Senado generó revuelo en el sistema financiero debido a que Morena planeaba modificar la Ley de Banxico.
La iniciativa, promovida por Ricardo Monreal, justificaba la reforma diciendo que los migrantes que volvían a México con sus dólares reciben menos dinero ante un tipo de cambio menos favorable. Además, se pretendía que las divisas que no fueran repatriadas a su país de origen formaran parte de las reservas internacionales de Banxico.
Los bancos, los integrantes de la Junta de Gobierno de Banxico y otros especialistas alertaron que las medidas propuestas por Morena violaban la autonomía del banco central y señalaron que de aprobarse la reforma habría riesgos estructurales para la economía mexicana.
Además, se alertó de que esta reforma a la ley podría fomentar el lavado de dinero.
Antes de que la ley fuera votada en la Cámara de Diputado se realizaron un par de Parlamentos Abiertos analizando los pros y contras de esta iniciativa. Las mesas de discusión se extendieron por siete horas el primer día y tres horas el segundo.
Igancio Mier, quien es el coordinador parlamentario de la Cámara de Diputados, declaró %que los diputados darían prioridad a la discusión a la reforma de outsourcing y la reforma eléctrica, dejando la ley Banxico fuera.
