En el caso de América Latina, el BM prevé un repunte del 5.2% este año, por encima de las previsiones del 3.2% estimadas seis meses atrás, aunque matiza que dependerá del "moderado progresos en la vacunación, la relajación de las medidas de restricción y un aumento de los precios de las materias primas", entre otros factores.
Las dos grandes economías regionales mostrarán sólidas expansiones: Brasil crecerá un 4.5% este año, gracias a una nueva ronda de pagos directos; mientras que México lo hará un 5 %, impulsado por el esperado auge en la demanda de Estaods Unidos en sector manufacturero y de servicios.
El último informe de Perspectivas Económicas Mundiales de la entidad mostró un aumento de 1.5 puntos porcentuales respecto a las previsiones realizadas en enero, antes de que Joe Biden asumiera la presidencia de Estados Unidos y promulgara un paquete de ayuda de 1.9 billones de dólares por el COVID-19.
Desde entonces, las vacunas se han distribuido mucho más en Estados Unidos y en algunos otros países ricos, lo que ha impulsado su producción, mientras que las previsiones se quedan cortas para las naciones emergentes y de bajos ingresos.
"Esta recuperación es desigual y refleja en gran medida los fuertes repuntes en algunas de las principales economías -sobre todo Estados Unidos, debido al importante apoyo fiscal- en medio de un acceso muy desigual a las vacunas", señaló el Banco Mundial en el informe.
Muchas economías emergentes y en desarrollo están experimentando un elevado número de casos de COVID-19, obstáculos a la vacunación y el retiro de las medidas de ayuda, según el banco.
Para 2022, esto dejará a la economía mundial un 2% por debajo de las previsiones anteriores a la pandemia, mientras que alrededor de dos tercios de las economías emergentes aún no habrán recuperado las pérdidas de ingresos per cápita del año pasado.
Si se acelera la distribución de las vacunas a los países en desarrollo, el crecimiento del PIB mundial en 2022, actualmente previsto en el 4,3%, podría llegar al 5%, dijo Ayhan Kose, economista del Banco Mundial.
La previsión de crecimiento del Banco Mundial para Estados Unidos en 2021 aumentó al 6.8%, su ritmo más rápido desde 1984, debido a un apoyo económico que el banco describió como "sin precedentes en tiempos de paz".
La previsión para la zona euro se elevó en 0.6 puntos porcentuales al 4.2%, mientras que la de China subió en 0.6 puntos porcentuales al 8.5%.
El Banco Mundial espera que los mercados emergentes, excluyendo a China, crezcan un 4.4% en 2021, previsión que se elevó en un punto porcentual desde enero.
El informe del Banco Mundial también señala los riesgos asociados a las crecientes presiones inflacionarias que añadirán alrededor de un punto porcentual a la inflación mundial en 2021. Afirmó que la desaceleración de la inflación del año pasado fue la "más tenue y de menor duración de cualquiera de las cinco recesiones mundiales de los últimos 50 años".
El informe señala que la preocupación del mercado por la inflación podría elevar los costos de los préstamos en los mercados emergentes y en los países de bajos ingresos, que también se ven más afectados por la inflación a corto plazo debido al aumento de los costos de los alimentos.