El 60% de las medidas adoptadas se encaminaron a reducir o eliminar aranceles e impuestos de importación y el 90% de las medidas restrictivas tuvieron que ver con la prohibición de exportaciones.
Algunas economías del G20 aplicaron reducciones arancelarias sobre productos como desinfectantes y sanitizantes, equipo médico y medicamentos.
“El comercio ha sido una fuerza positiva durante la pandemia al permitir el acceso a suministros médicos. A pesar de que el valor del comercio mundial de mercancías se redujo en más del 8% en 2020, el comercio de suministros médicos aumentó en un 16% y el de equipos de protección personal en un 50%”, detalló la OMC.
Sin embargo, advierte, el COVID-19 sigue siendo una “seria amenaza” para el comercio global y la salud pública. “La producción de vacunas ha sido lenta y la distribución desigual, contribuyendo a importantes disparidades en el acceso entre países, especialmente en economías en desarrollo de bajos ingresos”.
Las medidas que se implementaron para hacer frente a la pandemia han ido acabando. A mediados de mayo el 22% de las medidas de facilitación de comercio y el 49% de las restrictivas habían terminado.
Las medidas restrictivas vigentes representan 98,800 mdd y las de facilitación ascienden a 69,500 mdd, según estimaciones del organismo.
En torno a los productos no relacionados con la pandemia, las economías del G20 aplicaron 35 nuevas medidas de facilitación de comercio y 26 nuevas medidas de restricción. La cobertura de facilitación fue estimada por la OMC en 438,000 mdd, mientras que las medidas restrictivas de las importaciones sumaron 123,890 mdd.
El sector servicios se ha visto muy afectado en todos los países del G20, por lo que muchas de las medidas que afectan el comercio de servicios implementadas al principio de la pandemia se ampliaron para enfrentar los retos que el sector sigue enfrentando.