"Quedó muy bien establecido en la Ley Fintech: podrán operar los intermediarios financieros con las criptomonedas, bajo el efecto que determine el Banco de México y, como todos sabemos, no se ha determinado ninguna de ellas, por lo pronto, de cara a la clientela no está permitida la compra-venta de los activos virtuales", dijo Graf.
El titular de la CNBV dijo que las operaciones con criptomonedas son un ámbito que hay que ver cómo se desarrolla y destacó que México es "pionero" en no adelantarse a aprobar operaciones con estos activos como ya ocurre en otros países.
"Tiene que haber una clara separación en lo que ese mercado se va estabilizando y aprovechar lo mejor de la tecnología, tratar de llevarla a otros ámbitos, tener mucho cuidado con la compra-venta y seguirlo regulando", destacó Graf.
El funcionario indicó que la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) advirtió su preocupación sobre las operaciones que ocurren dentro del ecosistema de las criptomonedas y dijo que aunque en el futuro se verá un boom de estas operaciones, espera que se vaya aterrizando y ver qué es lo más útil.
La SEC no ha sido la única en levantar la ceja ante los criptoactivos, el Banco de México también ha externado su recelo ante la posibilidad de fraudes, como el ocurrido en Estados Unidos con Tether, empleada para más de la mitad de las operaciones con bitcoins.
En esa ocasión, los tokens desaparecieron y los inversionistas perdieron su dinero. La Fiscalía de Nueva York ha vetado las operaciones con esta moneda.
Juan Pablo Graf también resaltó que dentro del ecosistema de las criptodivisas se han dado desarrollos como las stablecoins, activos digitales o virtuales que están ligados o representados a un valor real, generalmente a una moneda, que deben seguirse de cerca.
En México, la empresa Moneta ofrece una stablecoin llamada MMXN que está ligada al peso mexicano. De momento, los clientes pueden adquirir otras criptomonedas desde 1,000 pesos y en el futuro planea entrar a los negocios de remesas y de pago en establecimientos comerciales.
"La parte de las stablecoins es algo muy similar a lo que tenemos nosotros en las fintech de pago porque (se trata de que) el dinero esté bien respaldado y con activos con poco riesgo de mercado, eso es lo que pasa en el segmento de pagos electrónicos", destacó Graf.
"Por lo pronto, está establecido en la ley que los intermediarios financieros del país regulados no pueden hacer operaciones con la clientela", reiteró.