Las cifras forman parte del informe "Panorama de la seguridad alimentaria y nutricional en América Latina y el Caribe 2021", elaborado junto al Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), el Programa Mundial de Alimentos (WFP) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
El incremento "podría explicarse en parte por los efectos de Covid-19", agregó la institución, que deja 46.5 millones de contagios totales y 1.5 millones de fallecidos, y provocó en 2020 una contracción del 6.8% del PIB, la mayor en 120 años.
Los países con mayor prevalencia de subalimentación fueron Haití (46.8%), Venezuela (27.4%), Nicaragua (19.3%), Guatemala (16.8%) y Honduras (13.5%), alertó la organización.
El resto registraron una prevalencia inferior al 10% y menor al 2.5% en el caso de Brasil, Cuba y Uruguay, agregó la institución.
En 2020, 267 millones de personas padecieron inseguridad alimentaria moderada o grave, es decir, 60 millones de personas más que en 2019 "no tuvieron acceso físico o económico a comida en cantidad o calidad suficiente para su salud y desarrollo".
En condición grave, es decir, que llegaron a pasar un día entero sin comer, se contabilizaron 92.8 millones de personas, una cifra que casi duplica la de 2014 (47.6 millones), agregó la FAO.