El envío de remesas se ha convertido en uno de los principales ingresos de la segunda mayor economía de América Latina, que se desplomó un 8.5% en 2020 debido a la crisis por la pandemia del coronavirus.
El Producto Interno Bruto (PIB) se contrajo en el tercer trimestre de 2021 un 0.4%, en su primera caída desde que comenzó su recuperación de la pandemia, golpeada por la tercera ola de COVID-19 y cuellos de botella en las cadenas de suministro.
En los primeros once meses, las remesas acumulan un valor de 46,834 millones de dólares, un 26.7% más que en igual lapso del año pasado.
El número de transacciones se elevaron un 19.8% a tasa anual, a 11.6 millones; mientras que el monto promedio por operación se colocó en 401 dólares, un 15% más que un año antes, informó Banxico.
Con información de Reuters