En México se gasta en inversión pública 3.1% del PIB, “eso es un poco más que el año pasado, pero sigue a niveles muy bajos”. De este gasto en inversión, el 90% se va al sector energético, por lo que no se generan los rendimientos necesarios para crecer y que los ingresos públicos sean mayores para atender temas apremiantes como salud y educación, explicó Alejandra Macías, directora ejecutiva del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
La necesidad de generar más recursos para el erario público y su mejor administración se intensificó con la pandemia, que ha afectado la recaudación de impuestos como el IVA y el ISR, además de que los ingresos petroleros tienen menos relevancia para el gobierno, dijo por su parte Mariana Campos, coordinadora de Gasto Público y Rendición de Cuentas de México Evalúa.
Cifras de Hacienda detallan que en 2014 la renta petrolera generaba el 30.7% de todos los ingresos presupuestarios, mientras que en 2015 -en la primera mitad del gobierno de Enrique Peña Nieto- bajó a 19.8%. En 2019 representó el 17.7%, y hasta el cierre de enero-noviembre de 2021 habían generado 17.1% de todos los ingresos públicos.
“Estamos en el momento que hace décadas Enrique Cárdenas (economista y profesor de la Universidad Iberoamericana Puebla), nos contaba en los 90 sobre el agotamiento del petróleo. Estamos llegando con bastante presión, se ve un año complicado. En 2021 la recaudación del IVA fue preocupante, tenemos un Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios agotado, nos hemos ido quedando sin opciones, esto nos hace plantear una ruta distinta al desarrollo de México”, dijo Mariana Campos.
Los estados son primordiales
“No solo se requiere pensar en nuevos impuestos, también integrar a los estados y municipios que están subdesarrollados en sus haciendas públicas”, agregó la especialista de México Evalúa.
Los participantes de la primera emisión de 2022 de Encuentro Expansión representan think tanks enfocados en finanzas públicas. En la Legislatura pasada de la Cámara de Diputados trabajaron con Alfonso Ramírez Cuéllar, coordinador del Grupo de Trabajo para la Transición Hacendaria, en realizar un análisis de las finanzas públicas, y propuestas de cambios a favor de estas. El seguimiento de este trabajo lo hace Jornadas por la Desigualdad.
“Veo puntos básicos de acuerdo, hay que trabajar en sacar de la crisis profunda que viven las entidades federativas y los municipios, tanto México Evalúa, CIEP, Oxfam, y la propia Auditoria Superior. La secretaría de Hacienda ya tiene un panorama claro de cuáles serían las medidas inmediatas, no tanto para alcanzar la recaudación subnacional, pero sí para dar pasos firmes para sacar a los estados y municipios de un letargo, una incapacidad para invertir y sobre todo para garantizar la seguridad de sus poblaciones y llevar adelante sistemas de bienestar más fuertes”, comentó Ramírez Cuéllar.
La secretaria técnica de Jornadas por la Desigualdad apuntó que los estados y municipios tienen que ser responsables en la recaudación y asignación de recursos, para ello se propone una convención nacional hacendaria, con el objeto de volver a estructurar y analizar como se están repartiendo los ingresos; “no solo la federación es responsable”.
Diego Vázquez, director de Investigación de Oxfam México, explicó que los gobiernos locales tienen entre sus tareas cobrar la tenencia y el predial, pero muchas veces no lo hacen por el costo político.
En tanto que, Mariana Campos de México Evalúa, refirió que solo con la tenencia y los refrendos moderados se podrían obtener hasta 80,000 millones de pesos para las arcas públicas.
Un sistema de cuidados injusto e ineficiente
El directivo de Oxfam explicó que adicional a los menores ingresos, hay presiones crecientes para el gasto público como la transición demográfica -menos personas jóvenes activas y más personas de la tercera edad-, lo que llevará a mayores costos por pensiones, una situación que afectará al sistema de cuidados, el cual ya es injusto e ineficiente.
“En México tenemos un sistema de cuidados injusto basado en la feminización, lo que debería de tocar al Estado y a los hombres se recarga en las mujeres”, comentó Diego Vázquez.
También es ineficiente, porque, luego de la pandemia, la mayoría de las mujeres no han podido reintegrarse a la actividad económica, lo cual tiene sus consecuencias en materia fiscal y del crecimiento económico.
Estimó que el valor monetizado del trabajo de cuidados que realizan las mujeres, no remunerado, es de entre el 25 y 27% del PIB.
“Si no hacemos cambios profundos en materia de gasto público hoy, nuestros hijos, nietos pagarán más deuda pública, estarán pagando por servicios con menos calidad”, advirtió Alejandra Macías del CIEP.