En conferencia de prensa detalló que los ajustadores de las aseguradoras están listos para atender cualquier cuestión en la zona, por ejemplo, cuando pasa un huracán se espera que pase la parte peligrosa, y los ajustadores ya tienen un protocolo para atender a las personas afectadas.
"Se esperaría la estabilidad después de la posible catástrofe; lo mejor es que los asegurados cuenten con la póliza en un lugar seguro y resguardado”, detalló en el marco de la 32 Convención de Aseguradores de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
El presidente de la AMIS, Juan Patricio Riveroll, explicó que el esquema de respaldo financiero “conocido como reaseguro” es muy importante por tener esquemas sólidos.
“La gran parte de esos riesgos fueron asumidos por las aseguradoras, con muy poca ayuda de reaseguro, en este tipo de eventos, que pueden ser daños muy grandes repentinos, este es muy importante, tenemos esquemas sólidos, estructurados, con aseguradoras de todas las categorías”, dijo.
El líder de la AMIS aseveró que los seguros contemplan riesgos por erupción, “la póliza no debe decir más, ya lo tiene, los autos son de los más expuesto por el tema de la ceniza, que le caiga una piedra, el riesgo está contemplado, será cubierto sin menor problema”.
Detalló que en las zonas aledañas al volcán no hay zonas industriales, y que mayormente son tierras agrícolas o bosque, además de zonas poblacionales.
De acuerdo con la directora general de la Asociación, ésta cuenta con tres veces el capital regulatorio para enfrentar este posible riesgo, “con la pandemia se demostró, por ese lado no hay problema”.
Destacó que aún la AMIS no tiene algún reporte por daños ocasionados por la actividad que ha tenido el volcán en días recientes, “prácticamente todo lo que es inmuebles y viviendas, son productos que se venden como paquete, tienen riesgos como rayos, incendios, inundación, erupción volcánica”.