“También porque ayudaba a que el patrimonio cultural de Banamex se quedara en nuestro país”, añadió.
El mandatario precisó que el gobierno perdió interés en comprar Banamex porque había varios interesados y, ahora, a su administración ya no le daría tiempo de llevar a cabo el proceso de compra-venta y dejar el banco en operación.
Además de lo que representaría para el gobierno el ahorro de comisiones y a la recaudación tributaria, “no se puede decir que no es negocio tener un banco porque el año pasado tuvieron utilidades en México por 230,000 millones de pesos”, de los cuales Banamex ganó más de 20,000 millones de pesos, destacó López Obrador.
El presidente tenía la idea de comprar Banamex a través de una asociación público-privada, donde el gobierno podría poner hasta 3,000 millones de dólares para realizar la transacción.
El 13 de julio de este año Jesús Ramírez, vocero de Presidencia, informó que el gobierno federal ya no estaba interesado en comprar el banco porque Citigroup “eligió otro camino” para vender Banamex.
Afánales de mayo Citigroup informó que ya no haría la venta directa, sino que se realizaría a través de oferta pública inicial (OPI).
