"Los datos recientes, sin embargo, no cambian materialmente el panorama general, que sigue siendo el de un crecimiento sólido, un mercado laboral fuerte pero en reequilibrio, y una inflación que avanza hacia el 2% en una senda a veces accidentada".
Sus comentarios repiten el mensaje y el tono que la Fed ha adoptado al tratar de equilibrar los riesgos de recortar las tasas de interés antes de que la inflación esté realmente controlada con los de debilitar la actividad económica más de lo necesario.
El miércoles, el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, afirmó en una entrevista que probablemente las tasas no se reduzcan hasta el cuarto trimestre de este año. Bostic anticipa que solo será apropiado un recorte de un cuarto de punto porcentual en 2024, menos que los tres o más recortes que pronostican la mayoría de sus colegas.
"Hemos visto que la inflación se ha vuelto mucho más irregular", dijo Bostic a la cadena CNBC. "Si la economía evoluciona como espero, y eso va a ser ver una robustez continua en el PIB y el empleo, y un lento descenso de la inflación durante el año, creo que será apropiado que empecemos a bajar a finales de este año, en el cuarto trimestre".
La presentación preparada por Powell y sus respuestas a las preguntas formuladas en el acto en Stanford, en California, no abrieron nuevos caminos en materia de política monetaria.
Al igual que en su conferencia de prensa al término de la última reunión de política monetaria de la Fed , el 20 de marzo, Powell mantuvo la perspectiva básica de que las tasas bajarán "más adelante este año".
Agregó que los datos recientes no "cambian materialmente el panorama general, que sigue siendo el de un crecimiento sólido, un mercado laboral fuerte pero en reequilibrio, y una inflación que avanza hacia el 2% por una senda a veces accidentada".