"La agencia destacó la solidez económica del país derivada de la fortaleza de la demanda interna. Señaló la importancia de la inversión pública y privada en relación con el crecimiento del PIB, así como los mayores flujos de Inversión Extranjera Directa asociados a la relocalización de empresas, para expandir la capacidad productiva de México", destacó la dependencia que encabeza Rogelio Ramírez de la O.
En lo que corresponde a los fundamentales macroeconómicos, la agencia apuntó que son fuertes y que el país mantiene un bajo déficit en cuenta corriente con respecto al PIB asociado al crecimiento de las exportaciones no petroleras y el flujo de remesas.
La calificadora japonesa también señaló el adecuado nivel de reservas internacionales para cubrir la deuda externa de corto plazo, aunado a la Línea de Crédito Flexible con el Fondo Monetario Internacional por 35,000 millones de dólares.
R&I mencionó que se ha implementado una política fiscal prudente, enfocada en controlar el nivel de deuda del sector público como porcentaje del PIB, nivel que permanece en un nivel moderado, por debajo de economías pares, a pesar del aumento del déficit fiscal esperado en el programa para 2024.
Pero también consideró que en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, la política económica que favorece a las empresas estatales (Pemex y CFE) con énfasis en la seguridad energética nacional, ha obstaculizado una recuperación total de la inversión en la economía.
Si bien la inversión como porcentaje del PIB alcanzó un nivel históricamente alto en 2023, se necesitarán políticas de apoyo a las empresas privadas para una recuperación sostenida de la inversión privada.