Detalló que el cambio climático ha impulsado políticas enfocadas en reducir el uso de combustibles fósiles, lo que implica un reto para las empresas para invertir en tecnologías más limpias y generar electricidad o incluso impulsar la electromovilidad.
Agregó que en Banxico se analizan y publican investigaciones al respecto. “Hasta ahora creemos que los riesgos están acotados, pero hay que seguir, monitorearlos de cerca y tomar acción”, apuntó.
Mayor uso de IA
En tanto, el cambio tecnológico, “pudiera generar cierta volatilidad, es un factor que importa mucho en el devenir económico de la historia (…) Cada vez observamos más cómo compañías buscan utilizar la inteligencia artificial en productos y servicios que ofrecen”, detalló.
Destacó que los precios de semiconductores para aplicar esta tecnología subieron en pleno auge de la pandemia de covid-19; estos precios descendieron con la normalización económica, pero reportaron alzas luego de la llegada de ChatGPT.
“Las acciones de todas estas empresas productoras de estos chips aumentaron, tampoco sabemos hasta dónde va a llegar, pero también es un ejemplo de los cambios que estamos viviendo en cambio tecnológico que hay que tener todos muy en cuenta”, aseguró.
Servicios se mantienen arriba de la meta
Finalmente, destacó que los precios de los servicios es una de las principales presiones para la inflación al alza.
“La cuestión es que servicios en general no tiene todavía un punto de inflexión claro hacia la baja, está desde hace un año rondando un nivel por encima de 5%, esto es de las principales preocupaciones que tenemos ahorita en Junta de Gobierno. Porque como pueden ver, las demás (presiones) ya tienen un comportamiento más favorable, pero en los servicios todavía notamos esta persistencia, que le hemos llamado, y es nuestro principal factor de riesgos en el balance que vemos hacia adelante”, advirtió Borja.