Trump, un republicano que asumirá el cargo el 20 de enero, se había comprometido a imponer aranceles del 10% sobre las importaciones mundiales a Estados Unidos, junto con un arancel del 60% sobre los productos chinos, tasas que, según los expertos en comercio, alterarían los flujos comerciales, elevarían los costes y provocarían represalias contra las exportaciones estadounidenses.
El nuevo plan del que se ha informado representaría un marcado cambio con respecto a las promesas que Trump hizo durante la campaña presidencial de 2024.
Un portavoz de Trump no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre la información del periódico.
Los asesores dijeron que los planes están en proceso de cambio y no se han finalizado, según el periódico.
No está claro a qué sectores irán dirigidos los aranceles.
"Las discusiones preliminares se han centrado en gran medida en varios sectores clave que el equipo de Trump quiere traer de vuelta a Estados Unidos", dijeron estas personas, según The Washington Post.
"Esos incluyen la cadena de suministro industrial de defensa (a través de aranceles sobre el acero, el hierro, el aluminio y el cobre); suministros médicos críticos (jeringas, agujas, viales y materiales farmacéuticos); y producción de energía (baterías, minerales de tierras raras e incluso paneles solares)", dijeron dos de las personas, según el medio.