En el balance financiero, el Infonavit tendrá ingresos por cuotas patronales, ingresos por créditos, ingresos por ventas y por las rentas que cobre la filial. “Todo eso se va a ver transparente en el estadio financiero”, aseguró el exdirector general.
Para Hartasánchez, Infonavit es “muy bueno” otorgando créditos a los derechohabientes. “El riesgo es encontrar el equilibrio entre expandir el acceso a la vivienda social, pero fortalecer el acceso al financiamiento, y que se puedan complementar sin descuidar ninguna”.
“El riesgo es que se invierta en la construcción y se pierda el enfoque (de otorgar crédito) y que eso tenga un detrimento muy fuerte no solo en el patrimonio de los derechohabientes, sino también en la capacidad de proveer ese financiamiento”, añadió.
El Artículo 41 Bis del dictamen aprobado establece que “la actividad de construcción es residual a la de crédito. Eso es muy importante, porque Infonavit primero suelta crédito y lo que te sobre es lo que vas a destinar a la construcción”, dijo Carlos Martínez.
“El Consejo de Administración aprobará anualmente el presupuesto de inversión en construcción, garantizando en todo momento que se destinen los recursos suficientes para el otorgamiento de crédito a las personas trabajadoras derechohabientes, conforme al programa de inversión habitacional que la Asamblea General apruebe en el plan financiero de cada año”, se lee en el Artículo 41 Bis.
Soto-Hay señaló que, al ofrecer las casas en venta y renta a precios que estén por debajo del valor de mercado, hay riesgo de que haya minusvalías en las subcuentas de vivienda de los trabajadores.
Martínez Velázquez dijo que, por ley, el Infonavit no puede entregar rendimientos que estén por debajo de la inflación, así que, mientras el instituto siga otorgando créditos e invirtiendo en valores que den algún retorno, “si mal te va, tu dinero no pierde valor porque tienes la inflación. Si al Infonavit le va bien, vas a tener la inflación más algo”.
Para Fernando Soto-Hay, el que se utilicen recursos privados para un fin público también hace ruido en la reforma al Infonavit.
Una pregunta que surge es cómo se construirá la vivienda. “¿Se hará a través de asociaciones con empresas? ¿Va a ser por subastas o por asignaciones directas?”, cuestionó.
Al interior del Infonavit se mantuvo el tripartito paritario, es decir, el sector obrero, patronal y el gobierno tendrán el mismo número de representantes. Sin embargo, preocupa que al director general lo designe el gobierno y el derecho de veto.
“Puede bloquear cualquier decisión que se tome en el consejo que es tripartita. Se convierte en una persona con un poder monumental para tomar las decisiones”.
La reforma “es un vehículo para, literalmente, apoderarse de enormes cantidades de dinero y utilizarla en forma irresponsable. Y el tiempo, desafortunadamente, nos dará la razón de que, técnicamente, lo que están haciendo es irresponsable, inviable, peligroso y le va a acabar costando a las subcuentas de vivienda de millones de trabajadores”, lamentó Soto-Hay.
“Las viviendas se van a construir sin una visión urbana, moderna, inteligente, integrada a las ciudades. El problema continúa, no se resuelve con la reforma. El problema de fondo es hacer una una política urbana de vivienda integral, desde el punto de vista del suelo interurbano y las necesidades de las ciudades en las zonas céntricas, y eso no existe”, añadió.